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De la cueva a Argentina

El cambio de propietario del Elche, que nació a orillas del Vinalopó en 1922, abre un nuevo escenario en el que por primera vez el club queda en manos foráneas

El expresidente José Esquitino.

Diez mil kilómetros separan Elche y Buenos Aires, dos ciudades que han quedado hermanadas por obra y gracia de un balón de fútbol, tras la adquisición del club de la ciudad nombrada en primer lugar por parte del grupo empresarial que lidera Christian Bragarnik, oriundo de la segunda.

El hecho puede calificarse de histórico, al ser la primera vez en casi cien años de vida de la entidad deportiva más representativa de Elche que esta es dirigida por parte de un grupo extranjero sin vinculación con la ciudad. A falta de conocer el nuevo organigrama directivo que decida el dueño, se abre un escenario desconocido en un club creado durante el verano de 1922 en la cueva que la familia Albarranch utilizaba para guardar el material pirotécnico. Allí nació un club que, casi un siglo después, cruza un océano tras la compra de Bragarnik a José Sepulcre del paquete mayoritario de las acciones firmada y oficializada el pasado martes.

En estos 97 años de vida, el Elche ha tenido medio centenar de presidentes. El último de ellos, Joaquín Buitrago, cederá su cargo tras apenas unos meses en el mismo. La relación de la ciudad de las palmeras con el puesto de máximo responsable del club ilicitano ha sido, evidentemente, muy fuerte en todo este tiempo, ya que casi la totalidad de los presidentes han nacido cerca del río Vinalopó.

Curiosamente, entre las contadas excepciones se encuentra el presidente que más tiempo ha ostentado el cargo y, sin lugar a dudas, uno de los más importantes de la historia del club. Manuel Martínez Valero, nacido en Murcia en el seno de una familia numerosa de la que ejercería como hijo mayor de ocho hermanos, lideró la entidad durante 17 años en dos etapas, primero entre 1962 y 1968 y posteriormente entre 1971 y 1982. Junto a José Esquitino Sempere fue la referencia del mejor Elche de la historia, aquel que desde Altabix puso su nombre en la élite del fútbol español, alcanzando una final de Copa y encadenando más de una década compitiendo sin interrupción en Primera División. Eso sí, pese a no nacer en Elche hay que apuntar que la familia Martínez Valero se trasladó a la ciudad a finales de los años 20, cuando el posterior presidente era un niño.

Juan Serrano, nacido en la localidad gaditana de Olvera y asentado en Elche a los 23 años, Amador Poveda, oriundo de La Romana, y Juan Anguix, natural de Valencia, son otros presidentes del conjunto franjiverde que no nacieron en la ciudad.

Si la identidad del nuevo presidente aún no se conoce, lo que sí parece claro es que la gestión del Elche será completamente ajena a personas de la ciudad, cuestión novedosa en la historia del club.

Otra fórmula original (y exitosa) en la gestión del Elche se produjo en 1953, con la entidad en una grave crisis que hacía tambalear su propia subsistencia. Entonces, los propios jugadores tomaron los mandos de la nave ilicitana y crearon la Cooperativa. Para ello convencieron a Pascual Antón Mollà, que dos décadas antes ya había ejercido como presidente, y con un movimiento romántico sacaron la situación adelante, poniendo las primeras piedras del proyecto que, en 1959, llevaría al Elche por primera vez a la élite del fútbol español. La fórmula era sencilla y eficaz: los propios jugadores administraban los ingresos por taquilla, restaban los gastos y se repartían los beneficios según la cotización de cada uno.

Otros ejemplos más recientes de gestiones lideradas por personas externas a la ciudad se produjeron tras la entrada del vasco Juan Carlos Ramírez, que fue máximo accionista (hasta el polémico préstamo del IVF) y consejero delegado del club, en una época en la que asegura que llegó a poner 5 millones de euros; o la de Juan Anguix, efímero presidente en 2015. Ahora, el turno es para el argentino Bragarnik.

Bragarnik amplía el vínculo entre la franjiverde y la albiceleste

Bragarnik Con la irrupción en escena de Christian Bragarnik, el Elche recupera su nexo con Argentina, un país al que se ha visto fuertemente relacionado a lo largo de su historia, a través de futbolistas, técnicos y empleados en la dirección deportiva o secretaría técnica. Entre los nombres más destacados estarían los de Alfredo di Stéfano, cuya primera experiencia en los banquillos fue en el club ilicitano; Roque Olsen, técnico con más partidos dirigidos como franjiverde; Néstor Rossi, Marcelo Trobbiani (campeón mundial como futbolista del Elche), Willy Caballero, Gómez Voglino, Rubén Cano, Armentano, Acciari, Finarolli, Diego Trotta o el exdirector deportivo Mario Barrera.

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