Pacheta terminó tremendamente feliz el encuentro frente al Deportivo. El técnico del Elche era consciente de la enorme diferencia que había entre ganar y perder el choque en Riazor y tenía los datos preparados. «El Deportivo es un club muy grande, ha estado 48 temporada en Primera y 46 en Segunda, con un estadio precioso en el que se disfruta del fútbol. Hicimos un partido serio y duro y supimos sufrir en momentos de mucha presión. Fuimos contundentes en las áreas y controlamos bastante bien el juego en muchos momentos del partido ante un rival herido, pero que tiene grandes futbolistas», comentó al final del encuentro.
El preparador franjiverde reconoce que lograr dos victorias consecutivas por primera vez en la temporada y sumar 22 puntos en 15 partidos «nos carga de moral», pero pide tranquilidad e ir poco a poco. «Nosotros a lo nuestro. Somos todavía muy humildes. Estamos en años de plomo y debemos estar quietecitos y calladitos porque como saquemos cuatro dedos por encima de la hierba, nos van a poner colorados. Quiero que después de una victoria vengan, como mínimo, grandes sensaciones».
Pacheta destacó la seriedad y el buen nivel mostrado por su equipo en conjunto. «Es difícil destacar a uno por encima de los demás. Edgar sigue bien, Óscar ha estado a un nivel maravilloso, los dos centrales han estado serios y contundentes. Juan Cruz, que venía de lesión, ha estado bien. Los dos mediocentros han estado fantásticos y los dos extremos han tenido fiebre durante la semana y hemos estado a punto de jugar sin ellos. Arriesgamos y luego los cambios vinieron muy rápido. Yacine tuvo un problema y se tuvo que marchar».
Cuando al entrenador burgalés se le preguntó por el recital que había dado Nino no dudó en asegurar «hay que ponerlo como ejemplo en las escuelas de fútbol. Es el máximo goleador y el que más partidos de Segunda lleva de la historia».
