El entrenador del Elche, José Rojo, Pacheta, volvió ayer a cerrar filas con el máximo accionista José Sepulcre y aseguró que está «contento e ilusionado» con la plantilla que tiene tras el cierre del mercado, al tiempo que reconoció que su equipo debe mejorar en concentración defensiva y en el juego de ataque. Tras sumar solo tres puntos de nueve posibles en el arranque de LaLiga Smartbank, el técnico está convencido de que sus jugadores darán «un paso adelante» mañana (18.00) en casa frente al Lugo en la cuarta jornada para recuperar «la magia» y la buena conexión con el Martínez Valero tras la decepción por la derrota (0-2) en el primer partido ante el recién ascendido Fuenlabrada.

Pacheta reconoció que el límite salarial fijado por la Liga de Fútbol Profesional ha condicionado la confección de la plantilla franjiverde, «y la de un montón de equipos más», al tiempo que destacó el «enorme esfuerzo» económico realizado por Sepulcre para aumentar el límite salarial y completar los cinco millones de presupuesto que cuesta el vestuario.

«El tema está cerrado, somos los que somos, pocos y a pelear hasta Navidad, junto a los del Ilicitano. Estoy contento e ilusionado y vamos a intentar ganar al Lugo», recalcó.

Sobre la llegada del último fichaje, el defensa paraguayo Danilo Ortiz, el preparador eludió cualquier polémica y se limitó a señalar que necesitaba un central zurdo y ya lo tiene. «Soy entrenador y debo sacar el máximo partido a los jugadores que tengo; cuando sea mánager general responderé a otras preguntas», indicó el preparador, que admitió que el club rastreó el mercado nacional a la búsqueda de un central, pero no pudo concretar el fichaje de los nombres que interesaban.

«Es un jugador que domina el oficio y que está para jugar, para adelante con él», añadió sobre Danilo. «Ahora vamos a ver cómo se ajusta al ritmo de competición europea y vamos a ir ajustándole».

En cuanto al irregular rendimiento de su equipo en las tres primeras jornadas -derrotas en casa ante el Fuenlabrada y en Zaragoza y victoria en Alcorcón-, Pacheta explicó que no está preocupado, «sino inquieto por mejorar lo que no va».

En concreto, el técnico admite que necesitan mejorar en concentración defensiva -«Hemos encajado cuatro goles y dos han sido de penalti y uno en propia meta, que eran evitables»-, así como en la elaboración del juego de ataque y llegada al área rival -«Nos falta pausa y paz con el balón, vamos demasiado deprisa»-.

No obstante, se declara satisfecho con el partido de Zaragoza, pese a la derrota por la mínima de penalti, por considerar que su equipo «corrió más que el rival», lo que le convierte en un conjunto competitivo de Segunda División, pero que aún debe «ajustar su juego y yo a los jugadores».

Pacheta no quiso comparar la actual plantilla con la del curso pasado, aunque reconoció que será «difícil mejorar la alegría y confianza» que alcanzó el Elche de la temporada pasada en los tres últimos meses de competición. «Somos otro equipo, otros jugadores, la clasificación lo dirá al final, pero estoy seguro de que este grupo va a funcionar».

Sobre el rival del domingo, el técnico cree que el Lugo de Eloy Jiménez es un equipo que hará correr al Elche en lo que será «un partido interesante», para el que recupera a Fidel, que ya ha superado su episodio de paperas. «Todo el equipo está para jugar, salvo Manolín por su problema en la rodilla».

El preparador burgalés precisa que su plantel está confeccionado para jugar habitualmente con defensa de cuatro hombres, aunque no descarta el recurso de los tres centrales, al tiempo que asegura que tiene alternativas en todas las líneas.

Pese al penalti en contra señalado en La Romareda, Pacheta volvió a defender la aplicación del videoarbitraje VAR, «porque es un tema de justicia» y el calendario asimétrico para ajustar los buenos partidos «al mejor momento del calendario».