Diego García y Ramón Segarra, presidente y consejero del Elche, ofrecieron su rueda de prensa de despedida del Elcheunas horas antes de hacerse oficial en la Junta Extraordinaria de Accionista del martes por la tarde. Ambos se extendieron en los agradecimientos a todos los estamentos del club y coincidieron tanto en que consideran que dejan un club en mejor situación del que se encontraron como en que el máximo accionista, José Sepulcre, es quien debe tomar las decisiones a partir de ahora en la gestión.

"Hace un mes, Segarra, Maruenda y yo creímos que había acabado un ciclo en el club", comenzó García. "Ramón y yo consideramos importante mantenernos hasta la Junta por las decisiones que se van a llevar a cabo en esta cita para asegurar la supervivencia del club. Nuestra relación con Sepulcre es estupenda y vamos a seguir vinculados al club como secretario no consejero y como asesor jurídico", añadió.

"Vinimos en un momento muy difícil, había que jugarse patrimonio personal y familiar, tras ser acusados en un juicio de concurso culpable. El ADN ilicitano nos ha ayudado a superar estas situaciones. Teníamos que solventar la amenaza de la liquidación por la decisión de la Unión Europea. Nos encontramos una brecha a nivel social y las líneas de comunicación rotas con las entidades futbolísticas. Nos vamos con la sensación de haber dejado al club mucho mejor, reduciendo la deuda en 30 millones, solucionando el tema de Europa si la sentencia nos da la razón en septiembre y creo que hemos conseguido que se hable más del balón y sus protagonistas que de los dirigentes", explicó el presidente saliente.

"Todos hemos sido capaces de conseguir un futuro esperanzador para el Elche y nuestra experiencia ha sido inolvidable. Sepulcre nos ha permitido trabajar con mucha independencia, pero pendiente como un padre cuando hemos necesitado ayuda, especialmente con aportaciones económicas en momentos cruciales", aseveró García. "Soy consciente de que no he estado a la altura de muchos presidentes que me han precedido y otros que me sucederán, pero creo que dejamos un club mejor del que nos encontramos", finalizó.

Segarra hace balance de su etapa

Por su parte, Ramón Segarra hizo un amplio balance de los cuatro años en los que ha ocupado el cargo de consejero en el Elche, ya que entró unos meses antes que García, durante el verano del descenso administrativo. "Me han parecido diez años. Aún recuerdo la foto mía yendo al Ayuntamiento con César Nohales, Alejandro Soler y Juan Contreras", recordó, sobre una de las primeras reuniones de empresarios de aquellos días decisivos. "Nos dijeron que era una locura tratar de salvar una deuda de 45 millones de euros y que era mejor empezar desde abajo con cualquier otro equipo", apuntó.

Segarra se acordó de apoyos y detractores, centrando sus críticas en las figuras del alcalde Carlos González y del director general del IVF, Manuel Illueca. "La aparición del alcalde con Illueca es de lo más esperpéntico que he visto en mi vida, igual que aprovechar la presentación del Festa d’Elx para faltarnos al respeto en su casa", se quejó Segarra. "Illueca ha sido nuestra gran motivación en los malos momentos por sus tuits con el reloj o con los cubatas", agregó.

Segarra centró su discurso también en la figura de José Sepulcre. "No tengo porque defenderlo, pero me da la gana hacerlo. Siempre se me ha vinculado a Sepulcre, pero yo no he estado en su casa ni en su barco ni he ido a sus cumpleaños. Para mí es un tío que está igual de loco que nosotros. Seguro que cometió errores y lo ha reconocido. Cuando nosotros llegamos, Pepe no estaba detrás de nosotros, pero sabía que podía sentarme con él para defender los intereses del Elche. Aceptó ese rol inicial y conforme ha ido avanzando el tiempo es la única baza que hemos tenido, acudiendo a las ampliaciones de capital necesarias para evitar la desaparición del club", explicó.

Por último, Segarra se refirió a las discrepancias en la gestión de los últimos meses, defendiendo la figura de Jorge Cordero, exdirector deportivo de la entidad. "A Cordero lo hubiese mantenido, sin ninguna duda. No es discutible que Nico Rodríguez, que casi mete al Getafe en Champions, es un gran profesional, discuto el contrato de larga duración. Tampoco hubiese elegido a Patricia Rodríguez, aunque desde LaLiga nos digan que es de las tres mejores profesionales que hay en España. Hubiese ido a por los otros dos", confesó. "Con el dinero que está poniendo, le he dicho a Sepulcre que debe tomar las decisiones él y no dejar esa carga en terceros", finalizó.