Pacheta sigue con los entrenamientos distendidos para la plantilla en la recta final de la temporada y una vez que el Elche ha conseguido el objetivo de la permanencia.
Si la semana pasada se llevó a los futbolistas a la playa, ayer tocó el turno de un «Street Jump», donde los jugadores disfrutaron como niños saltando en las colchonetas y realizando juegos como tiros a canasta.
Fue una sesión de trabajo diferente en la que dejaron a un lado el estrés de una larga y dura campaña y en la diversión fue la nota dominante. Además, se volvió a demostrar el buen ambiente que reina en el vestuario franjiverde, que está resultando clave para lograr los objetivos del ascenso la pasada campaña y la salvación en la actual.
Además, el cuerpo técnico también participó en los distintos juegos y, con Pacheta a la cabeza, fueron unos más dentro del grupo. El entrenamiento duró poco más de una hora y tras la sesión los jugadores regresaron al estadio Martínez Valero para darse masaje y poner las piernas a punto de cara al partido del próximo domingo (20 horas) ante el Deportivo.