El salario y la duración del contrato ralentizan la renovación de Pacheta

El poder de decisión del entrenador en los fichajes y las bajas y mantener la humildad en el objetivo son otros detalles que condicionan la negociación - Tanto el Elche como el técnico confían en pulir las divergencias y que al final haya un acuerdo

El salario y la duración del contrato ralentizan la renovación de Pacheta

Las negociaciones para que Pacheta renueve y continúe siendo el entrenador del Elche la próxima temporada se están cociendo a fuego lento. Como señalaban ayer fuentes del club ilicitano van «al tran tran» y, salvo giro improbable en los próximos días, la decisión final no se va a producir de forma inminente.

El técnico franjiverde dijo que no quería que su renovación se convirtiera en un culebrón y que su deseo era resolverla de forma rápida y lo antes posible. Pero lo cierto es que las diferencias en estos momentos son importantes, aunque no insalvables.

Dinero

Diferencia de unos 100.000 euros entre lo que pide uno y lo que está dispuesto a pagar el otro

El mayor pulso está siendo el económico. El preparador burgalés quiere que se valore su trabajo de las dos últimas temporadas y tener una ficha acorde con sus resultados. En la presente campaña, Pacheta tiene unos emolumentos entorno a los 200.000 euros (entre 180.000 y 190.000 más primas). Su representante, Luis Alonso, que ya ha mantenido los primeros contactos con el director deportivo del club ilicitano, Nico Rodríguez, ha solicitado entre 380.000 y 400.000 euros.

Desde la entidad franjiverde niegan que haya pedido los 500.000 como se está rumoreando. Aún así, consideran una cantidad demasiada elevada para la capacidad financiera del Elche, que la próxima temporada va a continuar teniendo un límite salarial bajo que va a rondar los 4,5-5 millones de euros. No obstante, entienden que los agentes siempre tiren por lo alto para empezar una negociación. En el Elche confían en que se pueda limar ese desacuerdo y que, al final, se quede en un término medio, entre 280.000-300.000.La diferencia es de unos 100.000 euros.

Temporadas

Un año más otro condicionado a los resultados o dos cursos

Otra de las divergencias que existen en estos momentos es la duración del contrato. El club ilicitano no se quiere hipotecar y ofrece una temporada más una segunda condicionada a los resultados con renovación automática en caso de alcanzar el «play-off» de ascenso o dar el salto de categoría.

Por su parte, el anterior director deportivo, Jorge Cordero, ofrecía dos años. Este tema no es tan preocupante y Pacheta admitió que el tiempo de duración no iba a ser un problema. A pesar de ello, para intentar paliar las diferencias económicas se podría alcanzar un acuerdo y compensar lo que solicita una parte y lo que está dispuesta a pagar la otra con dos temporadas, pero, en principio se va a intentar que sea una sola campaña.

Capacidad de mando

Supervisión en la entrada y salida de futbolistas

Pacheta ha tenido voz y voto en prácticamente todos los movimientos que se han producido en la plantilla de la presente temporada. Con Cordero existía una buena sintonía, aunque el técnico también ha estado en desacuerdo en algunas situaciones concretas como en la de Jony Ñíguez o en la salida de Benja al Hércules en el mercado de invierno. Sin embargo, tuvo que asumir las directrices del consejo de administración y del máximo accionista José Sepulcre. El entrenador pretende contar para la próxima temporada con una plantilla de 20-22 jugadores como máximo y prestarle más atención a la cantera. Por ello, solicita poder de decisión tanto en los fichajes como en las bajas, siempre con una buena coordinación con la comisión deportiva.

Objetivo

Mensaje de cautela a la hora de hablar de ascenso

El preparador burgalés tampoco quiere que desde el club se dé rienda suelta a la euforia y se ofrezca un mensaje desmesurado a la hora de hablar como objetivo de la lucha por el ascenso y que eso pueda presionar a los futbolistas. Pacheta siempre ha mostrado ambición, pero ya conoce el entorno franjiverde y sabe que tras ganar un par de partidos sueña a lo grande. El técnico quiere mantener la humildad y la cautela y hablar exclusivamente de alcanzar los 50 puntos para mantener la categoría.

Las negociaciones están en el tira y afloja todavía y la mayor discrepancia para alcanzar el acuerdo va a ser el económico. En la duración del contrato, la capacidad de mando y en el mensaje, las opiniones están bastantes cercanas y las pocas diferencias que existen son completamente subsanables.

La ventaja para las dos partes es que hay tiempo para limar las divergencias, aunque ninguna de las dos las quiere dilatar y pretenden que, a muy tardar, en ocho o diez días se pueda alcanzar un acuerdo definitivo.

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