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Análisis

Un buen proyecto para lavar su imagen

Sepulcre intenta pasar página a su pasado y volver a ilusionar a la afición con un equipo que aspire al ascenso - El máximo accionista ha cogido las riendas del club para planificar la próxima temporada

Un buen proyecto para lavar su imagen

El pasado 26 de febrero, tras la aprobación en la junta de accionista de la ampliación de capital para cambiar deuda por acciones, José Sepulcre se convertía oficialmente en el máximo accionista del Elche Club de Fútbol y el dueño del club ilicitano con, prácticamente, el 70% de los títulos. En aquella asamblea, el empresario ilicitano se dejó ver públicamente y no tuvo problemas en ponerse delante de los focos, algo que apenas había hecho desde su dimisión como presidente en 2015. Fue su primer paso pasa sacar músculo y empezar una nueva etapa en la que pretende lavar su imagen, que quedó muy deteriorada en los últimos años en la presidencia y, sobre todo, después del descenso administrativo.

Ese mismo día, el actual máximo dirigente de la entidad franjiverde, Diego García, señaló en su comparecencia posterior a la junta de accionistas que por primera vez el Elche tenía un dueño y que debería ser él quien tomase las decisiones a partir de ahora.Y así está siendo. Sepulcre, que venía trabajando y mandando en la sobra, descarta, por el momento, ponerse en la primera fila, pero quiere dejar claro que es él quien controla y domina el club ilicitano. En el último partido frente al Córdoba ya regresó, después de cuatro años, al palco del estadio Martínez Valero, aunque se situó en las últimas filas.

El expresidente se está involucrando mucho en el futuro del Elche y quiere diseñar un buen proyecto que permita olvidar viejas rencillas (aunque va a ser difícil porque parte de la afición sigue muy dolida) y volver a ilusionar con un equipo que luche por volver a ascender a Primera División.

Comisión deportiva

Gente de su confianza que dé un giro al actual funcionamiento

Lo primero que quiere hacer el máximo accionista es realizar un cambio en la parcela deportiva, prescindir de Jorge Cordero y dar un giro al actual funcionamiento, que trabaje como equipo y en la que esté gente de su confianza. Sepulcre tiene como ejemplo la forma de funcionar de la última temporada en Primera con Víctor Orta al frente de la dirección deportiva.

Para ello, pretende para ese cargo a Emilio Vega, que ya ejerció de secretario técnico en aquella campaña y conoce la metodología de Orta, quien es padrino de su hijo. Además, el técnico berciano ha demostrado su capacidad en otros clubes con presupuestos reducidos, como ha sido el caso del Huesca, al que llevó por primera en su historia a Primera División. El empresario ilicitano guarda muy buena relación con Vega y quiere que Sergio Mantecón, otro hombre de su absoluta confianza y al que trajo al Elche hace dos temporadas, sea su fiel escudero en la planificación de la próxima plantilla. Además, son dos personas que conocen perfectamente la casa y las virtudes y los defectos que la rodean.

Banquillo

Pacheta es la primera opción, pero tiene en la recámara a Luis García Plaza

Diego García dijo el pasado miércoles que el máximo accionista tiene total libertad para reunirse y negociar con cuantos directores deportivos y entrenadores considere oportuno. Y es lo que está haciendo Sepulcre pensando en el proyecto de la próxima temporada. Para el banquillo buscó un órdago a la grande que sabía que hubiera gustado y mucho a la afición. Ha contactado con Fran Escribá, con quien ha enderezado su relación después de que no terminase de la mejor forma en su última temporada. Pero el entrenador valenciano, como se esperaba, ha dado calabazas. De momento no quiere entrenar en Segunda División, actualmente está en el Celta de Vigo y si consigue la permanencia con el conjunto gallego tiene todas las papeletas para continuar en el cuadro vigués en la Liga de las Estrellas y no considera, por el momento, la posibilidad de volver al club ilicitano. Ya dijo en una entrevista que su único planteamiento de futuro para el Elche que le gustaría sería el de ser presidente.

La primera opción en estos momentos de José Sepulcre es Pacheta. El empresario ilicitano sabe que prescindir del actual técnico franjiverde provocaría el lanzamiento de muchos puñales sobres sus espaldas y una vez que se concrete el organigrama de la dirección deportiva los primeros deberes serán sentarse con el preparador burgalés y afrontar su renovación.

En el caso de no conseguir que Pacheta siguiera, algo que parece complicado porque el actual entrenador tiene muchas ganas de encabezar un buen proyecto en la entidad franjiverde con unos buenos cimientos, el máximo accionista tiene sobre su mesa el nombre de Luis García Plaza. Incluso ha compartido mesa y mantel con él en Altea.

García Plaza ya fue entrenador del Elche en la temporada 2006-2007 con Sepulcre de presidente. Ambos tienen muy buena relación y el preparador está libre después de ser cesado del Villarreal tras volver de China. En principio, su intención es hacerse un hueco en Primera División, pero ya ha comentado que no le importaría dirigir al Elche, siempre y cuando sea comenzando un proyecto desde el inicio de la temporada.

En principio es una opción secundaria y con varios condicionantes, pero que el empresario ilicitano también tiene en mente si no hay acuerdo para que Pacheta continúe al frente del conjunto ilicitano.

Fútbol base

Cambios en la dirección de la cantera

Otros de los cambios que se atisban de cara a la próxima temporada es en el fútbol base. Jesús García tiene complicado su continuidad como director de la cantera y, en principio, si fructifica finalmente la opción de Emilio Vega y Sergio Mantecón al frente de la comisión deportiva, también tendrían voz de mando en las categorías inferiores. Vega ya confeccionó la plantilla del filial cuando estuvo como secretario técnico y Mantecón conoce de cerca el fútbol base. Además, al frente del Ilicitano se encuentra Sergio Pelegrín, que es otra de las personas que cuenta con la confianza de Sepulcre y también podría ampliar sus funciones. Incluso, Pacheta, en caso de renovar, pretende llevar un control de la cantera porque su idea es contar con una plantilla corta de 21-22 futbolistas y completarla con chavales del fútbol base.

Uno de los proyecto que tienen en mente y que está proyectando el actual consejo de administración, con el consejero José Luis Maruenda como protagonista, es la construcción de una ciudad deportiva para el fútbol base, aunque, actualmente es un sueño lejano. Lo que sí que están obligados a llevar a cabo es el cambio de ubicación de los campos de entrenamiento del primer equipo y del filial porque los terrenos de los anexos al Martínez Valero hay que dejarlos a la empresa propietaria para el año que viene y ya se está estudiando cambiarlos a las parcelas que hay enfrente de la fachada principal del estadio.

Presidencia

Es una opción que valora, pero que, de momento, no contempla

Otras de las cuestiones que José Sepulcre se ha planteado y que algunos amigos y conocidos, incluso personal del club le han animado a hacer es la vuelta a la presidencia. Muchos le dicen que ya que ha aportado el dinero y que es el que manda, que vuelva a ser el presidente. Pero, de momento, no lo contempla, aunque no lo descarta en un futuro. Por ahora, quiere poner en marchar un proyecto atractivo que lave su imagen y que vuelva a ilusionar a la afición.

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