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Neyder se aleja del Elche

El colombiano y su agente no responden a la oferta de ampliación de contrato que incluye una cláusula de rescisión baja - El central acaba el 30 de junio y en el club temen que se haya comprometido con otro equipo

Neyder Lozano, durante un entrenamiento. antonio amorós

El futuro de Neyder Lozano, salvo un cambio inesperado de última hora, está lejos del estadio Martínez Valero. El Elche lleva desde antes de Navidad intentando renovar al central colombiano, que finaliza contrato el 30 de junio, pero sus deseos no han podido convertirse en realidad.

El director deportivo de la entidad franjiverde, Jorge Cordero, le ha presentado al representante del futbolista, Luis Alonso, que es el mismo agente de Pacheta; varias ofertas para ampliar su vinculación con el club ilicitano, pero, hasta el momento, no ha obtenido respuesta. Desde fuentes cercanas al Elche reconocen que la continuidad de Neyder «está muy difícil».

El defensa franjiverde, al finalizar contrato esta temporada, puede, desde el pasado 1 de enero, firmar con cualquier equipo y en el club ilicitano temen que ya se haya podido comprometer con otra entidad.

El central colombiano cumplió 25 años el pasado 4 de marzo y sus buenas actuaciones, tanto la temporada pasada como en el comienzo de la actual campaña, no han pasado desapercibidas. Ha sido seguido por varios conjuntos de Primera División y en la rumorología futbolística se le ha relacionado con clubes de la máxima categoría, principalmente con el Leganés, incluso con el Valladolid, Getafe o Espanyol. Al quedar libre, su edad y sus buenas condiciones físicas le hacen ser un jugador apetecible y de futuro.

Para intentar convencerle, Cordero le ha presentado una oferta de renovación de larga duración (tres años) con una cláusula de rescisión bastante baja (un millón de euros), con el objetivo de que, en caso de marcharse a un equipo de la máxima categoría, pueda dejar un dinero en el Elche, que ha sido el equipo que le ha dado la oportunidad de darse a conocer en el fútbol profesional español.

Un desconocido

Neyder Lozano llegó a la entidad franjiverde en el mercado de invierno de la temporada pasada. Procedía del Sanse, del grupo I de Segunda División B, cuando era un total desconocido. El jugador quería venir al Martínez Valero, pero el club madrileño no le dejaba, incluso recibiendo la cláusula de rescisión, que ascendía a unos 40.000 euros.

El presidente del Elche, Diego García, tuvo que presentarse con un notario en las oficinas de San Sebastián de los Reyes porque al no ser un club del fútbol profesional dependía de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y no de LaLiga, que sí que admite el depósito de la cláusula para dejar libres a los futbolistas. No fueron atendidos y García se tuvo que marchar corriendo a la Federación y presentar el acta notarial para convencerlos de que le permitieran ficharlo.

El club ilicitano tienen claro que el central colombiano se ha ganado en los terrenos de juego progresar, pero, también, le han pedido que tenga un gesto y que pueda dejar una cantidad de dinero en las arcas de la entidad franjiverde. Por ello, en la propuesta de renovación le han puesto una cláusula baja totalmente asumible para cualquier equipo de Primera. Incluso, han ido más allá y se conformarían con un pequeño porcentaje de un 20% de un posible futuro traspaso. Tanto Diego García como Jorge Cordero han intentado convencer a Neyder durante el viaje a Canarias, pero el futbolista remite siempre a su representante.

Cambio de actitud

En el Elche también han notado cierto cambio de comportamiento en el futbolista colombiano desde antes de Navidad. Era un chico que no se quejaba de nada y en los últimos meses esa situación ha variado y no lo ven tan centrado como antes. Hasta llegan a temer que la lesión que se produjo frente al Tenerife y que le obligó a pasar por el quirófano pudiera ser como consecuencia del estrés.

En el club ilicitano se está agotando la paciencia y esperan que se produzca en breve un desenlace, para bien o para mal. Pero ven su continuidad «muy complicada», aseguran.

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