El Elche intentará mañana (20.30) en La Romareda hurgar en las heridas abiertas del Real Zaragoza, un histórico del fútbol español en horas bajas, metido de lleno en la lucha por la permanencia en el fútbol profesional después de sumar un solo punto de los 12 últimos disputados. Tras su desplome en el último mes con tres derrotas consecutivas, el conjunto maño es 18º en la tabla con 31 puntos, sólo cuatro por encima del Extremadura, que marca la barrera del descenso.

Todas las alarmas se han disparado en el Zaragoza -un club con 58 temporadas en Primera, seis veces campeón de Copa y una de la Recopa de Europa- tras disiparse el revulsivo que supuso la vuelta al banquillo de La Romareda a mediados de diciembre del entrenador Víctor Fernández. De ahí que en todos los estamentos de la entidad maña se afronte el duelo de mañana ante los franjiverdes como la primera «final» por la salvación.

«Tenemos que ir a hurgar en los defectos del Zaragoza», destacó ayer el entrenador del Elche, José Rojo Pacheta. «El Zaragoza tiene grandes virtudes; espero que las bajas le pasen factura, pero los que les sustituyan son jugadores de primer nivel». Todo apunta a que el canterano Delmás cubrirá la ausencia por sanción en el lateral derecho de Nieto y Benito entrará en el lateral izquierdo, «a pierna cambiada», ante los problemas musculares de Lasure.

Pacheta quiere aprovechar el buen momento de su equipo para rentabilizar los problemas a balón parado que sufre el Zaragoza, que, además, sufre mucho en su propio feudo y es el cuarto peor equipo como local de la categoría, con tan sólo 15 puntos sumados en La Romareda de los 42 disputados -tres victorias, seis empates y cinco derrotas con 12 goles a favor y 16 en contra-.

«El próximo partido [contra el Elche] es muy importante para nosotros, necesitamos la victoria», apuntó ayer el centrocampista nigeriano del Zaragoza James Igbekeme. «Tenemos que estar bien concentrados en ganar, y no pensar en nada más», añadió en la misma línea en la que se pronunció un día antes su compañero de línea Eguaras: «El partido ante el Elche es casi una final y tenemos que mejorar nuestro juego en las áreas porque ahí somos muy débiles y es algo que nos está lastrando todo el año».