El Elche Club de Fútbol SAD necesita una inyección importante de dinero para que la LaLiga permita inscribir futbolistas en el mercado de invierno, que comienza en enero. Por ello, el club ilicitano puso ayer en marcha una nueva ampliación de capital de 1,7 millones de euros. Como ocurrió con la primera de 1,3 millones, que está a punto de finalizar, nadie, a excepción del expresidente José Sepulcre, está dispuesto a suscribir títulos y la solución para que la entidad franjiverde pueda alcanzar una viabilidad económica pasa por el empresario ilicitano.

Sepulcre ya ha confirmado a los actuales dirigentes de la entidad franjiverde que va a acudir a este aumento de capital y, a través de su empresa «Tenama Inversiones», tiene previsto asumir todas las acciones, por lo que sumaría cerca de siete millones aportados al Elche (2,9+1,3+1,7). Si se confirma, el expresidente se convertirá en el accionista mayoritario del club, con más de un 50% del capital social, superando, incluso, a la Fundación, que tiene pignorados los títulos del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), y que puede ver reducido su porcentaje del 54% a casi el 30%. Todo ello está supeditado al fallo del recurso que presentó el banco del Consell a la ampliación aprobada en la última general extraordinaria de accionistas.

Mercado de invierno

El permiso de LaLiga para fichar pasa por la ampliación

Sepulcre tiene claro que para poder reforzar la plantilla hace falta la ampliación de capital y, según fuentes cercanas al empresario ilicitano, su intención es aportar el dinero para obtener el permiso de LaLiga y poder dar de alta a Dani Calvo y Nacho Gil, incluso para firmar un par de futbolistas más que mejoren el nivel del equipo para conseguir la permanencia. Porque continuar en Segunda División es la única viabilidad económica que tiene la entidad franjiverde para poder sobrevivir y evitar una disolución. Sepulcre es consciente de ello y está al día de la mayoría de negociaciones que está llevando a cabo la comisión deportiva. Además, mantiene una comunicación diaria, con el presidente, Diego García, y con el consejero, Ramón Segarra, que le tienen informado de todos los movimientos institucionales del club.

Pago a Hacienda

En marzo se cumple el segundo plazo y hace falta más dinero

Otra de las circunstancias que obligan a una inyección económica es la deuda con Hacienda, que asciende a cerca de diez millones de euros. El Elche alcanzó el año pasado un convenio singular con la Agencia Tributaria que le obliga a aportar unas cantidades importantes en determinados plazos. Esta temporada, al estar en Segunda División, el club ilicitano debe pagar el 25% de la deuda y además Hacienda se queda con el 20% de los derechos televisivos. En el mes de septiembre se cumplió el primer plazo, que se afrontó con un préstamo de tesorería, de cerca de un millón, que aportó el propio Sepulcre, con el compromiso de canjearlos en una futura ampliación de capital. Y en marzo llega el segundo plazo, por una cantidad que también ronda el millón de euros, y la intención del consejo de administración es pagarlo con el dinero que se recaude de esta nueva venta de acciones puesta en marcha.

Convenio de acreedores

«Compró» parte de la deuda para canjearla por títulos

El empresario ilicitano también fue decisivo en la aprobación del convenio de acreedores, que se produjo en enero de 2017, y que está pendiente de fallo del recurso presentado por el IVF porque no se incluyó los 4,1 millones de la multa de Bruselas. El acuerdo salió adelante con el voto favorable del 68% de la masa acreedora ordinaria, con una quita del 65% y a pagar en diez años, con dos de carencia. Además también incluía el poder canjear el 100% de la deuda por acciones. Si se produce la aprobación definitiva, el convenio incluye unos 17 millones y la deuda del Elche pasaría de unos 24 millones a seis. Sepulcre llegó a acuerdos particulares con acreedores, entre ellos con Juan Carlos Ramírez, y les «compró» la deuda, por lo que todavía podría aumentar de forma considerable su número de acciones y su porcentaje del capital social de la entidad, porque su intención es, también, cambiarla por nuevos títulos. A expensas de la resolución judicial, en enero de 2019 entrará en vigor el convenio, una vez concluidos los dos años carencia y, también, hará falta más dinero para poder afrontar los compromisos de pago.

Venta del venta del club

Interlocutor en cualquier movimiento que se ha producido

Como accionista de referencia, Sepulcre ya ha sido un interlocutor clave en la posible venta del club ilicitano. En las negociaciones que ha realizado el IVF, el empresario ilicitano ha intervenido y se ha reunido en varias ocasiones y, en otras muchas, ha dialogado vía telefónica con Manuel Illueca. Ahora, si los juzgados no frenan las diferentes ampliaciones de capital, el expresidente tendrá todavía más poder y se convertirá, prácticamente, en el dueño absoluto del Elche. En principio, sus allegados niegan que su intención sea vender el club a un inversor o la de volver a la primera fila del palco. De todas formas, ninguna de las dos opciones está descartada. Incluso, Sepulcre mantiene hilo directo con Mariano Aguilar, exdirector general de la entidad franjiverde en la época de Ramón Sánchez y representante de futbolistas, que está ejerciendo de intermediario ante el posible interés de cualquier fondo de inversión que quiera entrar en el Elche. Además, con todas estas aportaciones, Sepulcre también pretende lavar su imagen ante la afición después de una mala gestión que llevó al club a la ruina económica y al doloroso descenso administrativo del verano de 2015, aunque siempre ha echado la culpa a Juan Anguix.