Todos los aficionados del Elche se las prometían felices cuando Javi Flores marcó a los cuatro minutos tras una buena jugada de Benja, que le dejó el gol en bandeja. Los franjiverdes encarrilaron pronto un partido que podría haber significado un salto cualitativo y cuantitativo en la clasificación. El Almería no daba sensación peligró y se mostraba como un equipo vulnerable a nivel defensivo.
Los escasos 7.500 espectadores que se dieron cita en el Martínez Valero y los muchos que siguieron el encuentro por televisión ya vaticinaban unas plácidas vacaciones navideñas con el conjunto de Pacheta en el mejor momento de la temporada.
Pero el fútbol, en muchas ocasiones, es caprichoso. Los partidos duran 90 minutos y cuando uno concede regalos, al final, termina pagándolos. Incluso pudo ser peor y el empate deja cierto sabor agridulce porque los ilicitanos acumulan tres partidos sin perder y continúan con cuatro puntos de ventaja sobre las posiciones de descenso, a expensas de lo que haga el Reus hoy en su partido como local frente a Osasuna.
A raíz del gol, el Elche no supo leer el partido. Le faltó templanza para hacerse dominador de la pelota y controlar el juego. Los franjiverdes abusaron del balón largo, aprovechando los espacios que habían a las espaldas de la defensa visitante. Pacheta apostó por un doble pivote más de corte defensivo con Manuel Sánchez y Xavi Torres. El cordobés estuvo condicionado con la tarjeta que le mostraron a los 20 minutos y quedó demasiado encorsetado por delante la defensa y no se atrevió a liberarse. Por su parte, el de Xàbia, aunque se movió con más libertad por la medular, también tendió a no perder el sitio y a salvaguardar la zona de creación.
Todo ello provocó que el juego se volviese más vertical cuando lo que el resultado invitaba a ser más horizontal en el movimiento del balón. Javi Flores jugó escorado a la izquierda y junto a Juan Cruz fue de lo más destacado del primer tiempo. En un partido de tanto ida y vuelta, Nino pasó desapercibido y no entró nunca en juego, mientras que Iván Sánchez realizó su peor partido de la temporada y estuvo desaparecido. Además, Alexander tampoco le dio profundidad a la banda derecha y estuvo muy discreto.
El más activo en el juego ofensivo fue Benja, en quien Pacheta volvió a depositar su confianza. El atacante catalán, sin estar demasiado brillante, le dio lógica a casi todo lo que hizo.
Sufrimiento en la estrategia
Sufrimiento en la estrategiaMientras, el Almería no daba señales de peligro, salvo a balón parado. Cuando llegaba la estrategia, la defensa franjiverde temblaba. El ilicitano Álvaro Giménez, que volvía a casa, avisó con un remate al larguero y cuando el descanso estaba a punto de llegar el árbitro anuló, de forma correcta, por fuera de juego, un gol almeriense. Menos mal. Con 1-0 y con apenas sufrimiento se llegó al descanso.
El segundo tiempo comenzó con una buena oportunidad de Benja. Todo transcurría con cierta normalidad hasta que llegaron diez minutos fatídicos, del 53 al 63. Ahí fue el turno de los regalos. Primero una barrera mal colocada permitió a Álvaro, que no lo celebró, empatar en un golpe franco, con un disparo ajustado al poste. De nuevo la estrategia...
Mazazo inesperado
Mazazo inesperadoPero aún fue peor. En el 63, una falta escorada a la parte izquierda del ataque almeriense, sin mucho peligro aparente, la lanzó directa a portería Juan Carlos Real y Francis Uzoho se «tragó» de forma increíble el balón y entró al fondo de la portería. 1-2 y ver para creer.
Quedaba mucho partido por delante y tocó arrebato. Pacheta dio entrada a Josan por un desaparecido Nino. Rompió un doble pivote (Manuel Sánchez-Xavi Torres) que no estaba funcionando y juntó a Benja con Sory en una pareja atacante inédita hasta ahora. Abrió el campo con Iván Sánchez y Josan en las bandas, Xavi Torres como centrocampista de contención y Javi Flores dejó la banda izquierda y pasó a ser el organizador del juego.
El Elche, sin grandes alardes, mejoró. Benja tuvo el empate pero remató al cuerpo de un defensa. Y en el minuto 72, el delantero catalán, muy listo, supo provocar un claro penalti por un agarrón de un defensor. Xavi Torres fue el más valiente de todos. Pidió el balón, lanzó, engañó a René y empató (2-2) con todavía 18 minutos por delantero para obrar la remontada.
El estado anímico cambió como en las distintas fases que tuvo el partido. Los ilicitanos aún se veían capaces de ganar y los almeriense miraban más al suelo pensando que se le había escapado una buena oportunidad para vencer fuera de casa.
Pero cuando uno regala tanto es difícil. Los franjiverdes lo intentaron, pero les faltó claridad en ataque. Josan tuvo un par de arrancadas por la banda derecha, pero no terminó de culminar. El tiempo pasaba y el tercero no llegaba.
Juan Carlos Real tuvo el triunfo en sus botas para el Almería y en un remate, al alimón, entre Xavi Torres y Gonzalo Verdú, con las manecillas del reloj señalando casi el minuto 94, con el que iba a concluir el encuentro, pudo desatar la euforia en el Martínez Valero.
El marcador ya no se movió y el empate es justo porque la derrota hubiese sido un castigo excesivo para los dos equipos.
Al final, premio menor para ilicitanos y andaluces, que viene mejor para el conjunto almeriense, pero que a los franjiverdes tampoco le viene mal porque siguen sumando y alejándose de los puestos de descenso, a expensas de lo que haga hoy el Reus.
Ficha técnica:
ELCHE CF: Francis, Alexander, Gonzalo Verdú, Neyder Lozano, Juan Cruz, Manuel Sánchez (Josan, m. 68), Xavi Torres, Javi Flores, Iván Sánchez, Nino (Sory, m. 68) y Benja (Gonzalo Villar, m. 82).
UD ALMERÍA: René, Romera, Owana, Saveljich, Martos, Arzura (Juan Ibiza, m. 82), De la Hoz, Corpas, Luis Rioja, Álvaro Giménez y Real (Caballero, m. 90).
ÁRBITRO: De la Fuente Ramos (Castilla La Mancha). Amonestó a Manuel Sánchez, Benja, Alexander, Javi Flores, , Iván Sánchez y Xavi Torres por el Elche; y a Arzura por el Almería.
ESTADIO: Martínez Valero, ante 7.454 espectadores. La peor entrada de la temporada. Los jugadores del Elche salieron con una camiseta de ánimo a Borja Martínez, que fue operado el pasado miércoles y estará entre tres y cuatro meses de baja.
