José Juan y Manu son más estrellas de Galicia que la cerveza y el duelo del domingo ante el Lugo (18 horas) va a ser muy especial para ambos cuando vean enfrente al conjunto gallego. El portero vigués fue inquilino del club del Ángel Carro durante los últimos cincos años antes de recalar en el Elche, mientras que el lateral ourensano, aunque nacido en tierras suizas, firmó diez años excepcionales en los que no solo fue clave en el ascenso del equipo lucense a Segunda División en la 2011-2012, sino que vivió el cambio que la entidad lucense sufrió en su estructura, ya que dio el salto al fútbol profesional tras años por las catacumbas y sin protagonismo en la élite.

Medirse, a partir de las 18 horas, al Lugo, será algo especial para ambos aunque tratarán de dejar durante 90 minutos de lado el aspecto sentimental, conscientes de que la victoria del domingo es clave para el Elche en su objetivo de salir de los puestos de descenso. «Es un partido especial y bonito para mí», reconocía ayer José Juan antes de señalar lo siguiente: «Pasé cinco años muy buenos y le tengo cariño al club. Pero cuando empiece el partido, todo se queda a un lado. Necesitamos sumar la primera victoria y vamos a saltar al campo con esa idea».

El guardameta vigués se fue de Lugo en contra de su voluntad en el verano del 2017 y le tocó empezar de nuevo y en Segunda División B. Llegó «de rebote» al club del Ángel Carro tras la renuncia de Diego Rivas. Al finalizar su periplo en tierras gallegas terminó también, como su antecesor, en Elche, paradojas de la vida, equipo con el que la pasada campaña logró el ascenso a Segunda realizando un gran trabajo. De nuevo en la categoría de plata del fútbol español, José Juan sigue teniendo la confianza de Pacheta y ha jugado todos los partidos que se llevan de Liga.

José Juan coincidió durante cinco años con el lateral Manu en el conjunto lucense. El defensa inició su andadura futbolística en el año 2003, debutando en el Ourense, con cuyo equipo militó cuatro temporadas, todas ellas en Segunda B.

En 2007 llegó al Lugo como extremo y acabó siendo reconvertido a lateral de la mano de Quique Setién, técnico con el compartiría vestuario de 2009 hasta 2015 y del que guarda un buen recuerdo aunque en los primeros meses no contara con él.

Con el equipo gallego, rival de los franjiverdes el domingo a partir de las 18 horas, se convirtió en uno de los héroes del ascenso a Segunda. En la capital gallega nadie olvida aquel 24 de junio de 2012. Ese día, Manu convirtió en gol el penalti que dio el ascenso al conjunto albivermello ante el Cádiz en la recordada como la «A tanda do Carranza». El sueño de miles de personas estuvo en sus botas. Colocó el balón en el punto fatídico, no le temblaron las piernas y con una tranquilidad inaudita mandó el balón para adentro sin que Aulestia pudiera hacer nada para evitarlo. Manu es uno de los futbolistas que más veces ha vestido la camiseta del CD Lugo en Segunda División, con más de 178 partidos en su haber en la categoría de plata. En total, son 344 partidos, si añadimos los de la categoría de bronce, con un total de 17 goles.

José Juan y Manu se medirán el domingo al equipo del que son historia viva. Durante 90 minutos serán franjiverdes, pero, a partir de entonces, el Lugo seguirá en sus corazones mientras vivan.