Han pasado menos dos meses desde el último partido del Elche en Segunda B frente al Villarreal B, pero el conjunto ilicitano, a pesar de la diferencia de la categoría, mantiene su identidad, sus mismas armas y sus mismas virtudes. La única diferencia en el partido de ayer frente al Granada fue la falta de pegada y que, en esta ocasión, Nino no apareció para resolver, aunque a punto estuvo de hacerlo nada más salir al terreno de juego.
El conjunto de Pacheta trasmite, cuenta con futbolistas que se dejan todo en el terreno de juego y que, ante todo, es muy fiable a nivel defensivo. Fue un empate a cero, pero empezar sumando siempre es importante y más ante un rival que parte con la vitola de candidato a luchar por el ascenso y que, en algunos momentos, se mostró excesivamente duro, parando el juego y frenando con cualquier tipo de artimaña a los «jugones» franjiverdes.
Es sólo el comienzo y queda una dura guerra de 41 batallas por delante y el cuadro ilicitano cuenta con mimbres para salvar dignamente la categoría. Incluso, si es capaz de encontrar el camino del gol, no debe sentirse inferior a ningún equipo en una Liga 123 que se presenta más dura que nunca.
El Elche dio una buena imagen y seguro que la afición se fue satisfecha y orgullosa de la entrega de sus futbolistas. Sólo faltó esa pegada que en Segunda B marcaba diferencias, pero que en Segunda hay que afinar mucho más porque los contrarios tienen más identidad.
A los franjiverde les costó entrar en el encuentro. La responsabilidad y los nervios del estreno se notaron. Pacheta apostó por un once muy reconocible, con hasta nueve jugadores de la temporada pasada y sólo Gonzalo Villar y Xavi Torres de los nuevos. La portería y la defensa fueron las mismas y se notó porque José Juan, Tekio, Gonzalo Verdú, Neyder y Manu se entienden de maravilla.
El paso de los minutos sirvió para liberar tensión. El Granada no aprovechó esos primeros instantes y, a partir de ahí, los jugadores franjiverdes se soltaron. Iván Sánchez y Josan comenzaron a aparecer por las bandas y, aunque a Gonzalo Villar y a Javi Flores les costaba entrar en contacto con el balón, el empuje del Elche obligó a los granadinos a ir perdiendo metros y a meterse a defender en su propio campo.
Los ilicitanos tuvieron unos minutos brillantes y varios avisos, dos de Josan y uno de Gonzalo Verdú en la estrategia. El premio pudo llegar en los instantes finales del primer periodo. Sory Kaba levantó al público de sus asientos con una gran jugada individual desde casi el centro del campo, pero al guineano se le hizo de noche cuando entró en el área y su disparo fue demasiado tímido para poner en apuros a Rui Silva. Hubiera sido el justo broche para un primer tiempo en el que los hombres de Pacheta, a los puntos, fueron mejores que los andaluces.
Momentos de agobio
El descanso activó más al Granada que comenzó el segundo periodo encontrando más a Vadillo, Fede Vico y Antonio Puertas, sus tres mediapuntas y eso se notó en el juego. El Elche pasó momentos de agobio que superó a base de sacrificio, unión y su mejor virtud: la seguridad defensiva.
El técnico franjiverde decidió que era el momento de sacar a sus guerreros más cualificados en ataque: Nino y Benja. La grada lo agradeció y en los primeros minutos con el almeriense y el catalán en el terreno de juego parecía que se iba a repetir una historia muy vista en el «play-off» de ascenso. Nino estuvo a punto de enganchar una, pero, esta ocasión, la suerte no sonrío.
El Granada siguió teniendo más el balón y Puertas tuvo la mejor oprotunidad visitante, pero el balón salió rozando el poste.
A Xavi Torres se le acabó la gasolina y Pacheta decidió situar a Javi Flores de mediocentro, con Villar y Chuca de escuderos. Una apuesta que parecía arriesgada porque ninguno se caracteriza por ser futbolistas de corte defensivo.
El choque entró un «pacto» de no agresión. Nadie quería perder el punto, porque no es lo mismo comenzar perdiendo que empatando. La bandera blanca atisbaba a aparecer. Pero el orgullo de los hombres de Pacheta no lo permitieron y aún sacaron fuerzas de flaquezas para un arreón final en el que Chuca, que no había aparecido, tuviera una buena ocasión para dejar todo el botín en casa. Un defensa lo impidió y, al final, reparto de puntos, que hizo justicia a lo visto en el terreno de juego, y que mostró a un Elche con motivos para soñar.
FICHA TÉCNICA
ELCHE: José Juna, Tekio, Gonzalo Verdú, Neyder, Manu, Xavi Torres (Chuca, m. 73), Gonzalo Villar, Javi Flores, Josan (Nino, m. 63), Iván Sánchez y Sory (Benja, m. 63)
GRANADA: Rui Silva, Quini, Víctor Díaz, Germán, Álex, Martínez, Montoro, Nico Aguirre (Alberto Martín, m. 61), Vadillo, Antonio Puertas, Fede Vico (José Antonio, m. 77) y Adrián Ramós (Rodri, m. 59)
ÁRBITRO: Varón Aceiton, del colegio balear. Amarillas a Nico Aguirre (m. 17), Gonzalo Villar (m. 40), Gonzalo Verdú (m. 75), Quini (m. 81) y a Álex Martínez (m. 91)
ESTADIO: Martínez Valero, ante 11.025 espectadores.
