José Alberto López (Oviedo, 21-5-82), técnico del Sporting B, está ilusionado con su filial y considera que llegan al estadio Martínez Valero sin complejos. A su juicio, en el encuentro de mañana, «no hay favorito, pero en caso de haberlo, por historia y ser el primer equipo, debería ser el Elche, que está concebido para disputar el ascenso. Nosotros vamos sin presión y con la ilusión de disfrutar y hacer un gran partido delante de su afición».

José Alberto López se muestra optimista de cara al partido de ida de la segunda eliminatoria del play-off, que disputará el Sporting B este domingo a las 19.00 horas en el Martínez Valero frente al Elche. «Nos motiva el ambiente que habrá en el campo», destaca el técnico del filial sportinguista.

Para el duelo de ida, cuenta con la baja de última hora de Juan Rodríguez, pero va a viajar con Adri Montoro y Nacho Méndez, que no ha sido convocado por Baraja. «El Elche es un equipo con una trayectoria muy positiva con Pacheta, no conoce la derrota, es muy intenso y cuenta con futbolistas de otra categoría. Pero tenemos nuestras armas e intentaremos minimizar sus virtudes», reflexiona José Alberto. Considera vital poder hacer un gol en el coliseo franjiverde de cara al encuentro de vuelta. «En este tipo de eliminatorias tiene mucha importancia marcar a domicilio. La dinámica fuera de casa del equipo es muy positiva, vemos puerta con mucha facilidad, y vamos a ver si somos capaces de conseguir un gol que nos de una pequeña ventaja», explica.

Si el Sporting acaba tercero la Liga, jugaría la vuelta de la primera eliminatoria del «play-off» el sábado 9, por lo que el filial podría jugar en El Molinón la vuelta. «No tenemos capacidad de decisión, pero sí que nos gustaría jugar en El Molinón, porque es un premio para la buena temporada de los chavales y una comodidad para el público. Si jugamos ahí nos va arropar mucha más gente», destaca.

José Alberto comenzó su carrera como entrenador en los equipos minibenjamines del Astur y pronto se incorporó a las categorías inferiores del Sporting, con un paso intermedio por el Covadonga de Tercera División en la campaña 2013-2014.

Dirigió el Sporting Juvenil de División de Honor antes de dar el salto al filial, con el que la pasada campaña logró el ascenso a Segunda División B. Fue su primer año como profesional. Hasta entonces compatilizaba el fútbol con su trabajo en Ikea. «Me gustaría no tener que volver a usar mi plaza laboral porque sería una buena señal, pero tampoco se me caerían los anillos. Soy una persona muy normal, muy cercana a mi gente y que he pasado por todas las categorías. Empecé a entrenar en el Astur con chavales de 4 años, llegamos a ser subcampeones de España», señalaba el año pasado el preparador asturiano tras el ascenso. Este año ha hecho una campaña espectacular con el Sporting B y aspira a lo máximo.