El mundo del fútbol cambió radicalmente desde que entró en vigor la ley de sociedades anónimas deportivas. Desde entonces, los sentimientos y las mayorías que representaban los aficionados entorno a un equipo pasaron a un segundo plano. Unas pocas personas que han invertido su dinero han pasado a controlar los clubes de fútbol y lo manejan en función de sus intereses particulares y económicos.
El Elche no es una excepción y la figura del expresidente José Sepulcre es capital a la hora de tomar decisiones. El empresario ilicitano, a pesar de dejar la entidad franjiverde en abril de 2015, sigue ejerciendo su tiranía y manejándola en la sombra.
El próximo 5 de febrero está fijada la Junta General de Accionistas en la que se deberá aprobar la oferta de compra del crédito del Instituto Valenciano de Finanzas que tiene como garantía el 54,7% de los títulos del Elche que, actualmente, controla la Fundación. Sepulcre tiene todo bajo control y se va a hacer lo que él quiera. De hecho, aunque en la votación se abstuviera la Fundación, algo que está por ver, el expresidente tiene todas las papeletas para ganarla porque cuenta con el apoyo de un buen número de los máximos accionistas.
Restando ese 54,7% de la supuesta abstención, el resto (45,3%) está controlado. El propio José Sepulcre tiene el 7,5%, pero además, entre los primeros nombres de la lista del reparto de los títulos figuran varios allegados a él.
Helike Football Managament, cuyo representante es el actual presidente, Diego García, cuenta con el 2.8%. Kunta Nucía, que maneja el exsecretario general Antonio Rocamora posee el 2,67%. A ellos habría que unir otros más que probables apoyos como son los de Orienting 2008 SL (1,85%), propiedad del exconsejero Francisco Sánchez, que también tiene una participación importante a través de la empresa Mercaoleza (0,45%). Sin olvidar a Advice Sun Industria de Tomás Alvarado y Serrano Aznar Obras Públicas SL, que está representado por los actuales directivos Ramón Segarra y César Nohales, que tiene un 0,53%.
Sólo hay una posibilidad remota de que Sepulcre y los suyos pierdan la votación y, aún así, estaría muy reñida. Sería el caso, poco probable en estos momentos, de que otros accionistas mayoritarios como son los expresidentes Amador Poveda (2,60%) y Francisco Borja (1,90%) se unan al resto de accionistas minoritarios. En ese supuesto también tendrían que verse acompañados de, prácticamente, la totalidad de socios minoritarios. Algo que, actualmente, parece inviable.
Ayuntamiento
Otro papel fundamental lo tendría el Ayuntamiento de Elche, que cuenta con el 3,2% de los títulos. Pero en los últimos días ya se ha visto como el alcalde, Carlos González, ha manifestado que la oferta de Sepulcre es totalmente lícita porque se trata de una subasta pública. Una situación que parece que va a provocar la abstención para no perjudicar al IVF.
Mientras tanto, la oposición al expresidente y al actual consejo de administración, que está representada por la asociación de pequeños accionistas «Regeneración ECF» y por la platafomora «Salvemos al Elche», siguen intentando recabar apoyos, aunque saben que lo tienen muy difícil como ya sucedió en la junta general de septiembre de 2015 cuando, a pesar de contar con el respaldo de más de 5.000 aficionados, sólo pudieron reunir poco más del 3% del accionariado.
Ayer, representantes de estos dos colectivos mantuvieron una reunión con José Miguel Garrido, quien también quiere comprar el crédito del IVF. El empresario madrileño insiste en que el Elche no va a presentar el aval de 4,1 millones y la subasta va a quedar desierta.
