El informe de los fiscales Vicente Plaza y Francisco José Marco, que han solicitado al juez que declare culpable el concurso de acreedores del Elche y apuntan como responsables a Sepulcre, García, Ramírez, Anguix, Rocamora y a varios de sus exdirectivos, también ha centrado la mirada en la Fundación del club ilicitano y no ha tenido reparos en asegurar que «resulta indudable que ha sido pervertida en todo este tiempo, nutriéndose en cada momento de consejeros, exconsejeros y en cualquier caso de personas afines al presidente Sepulcre que han servido de escudo y paraguas al consejo de administración bajo su presidencia e incluso cuando ya había dejado de ostentarla, asegurándose en todo momento el voto del accionista mayoritario del Elche para favorecer su gestión y, con ésta, sus propios intereses personales y económicos así como los de terceros afines».

Favorecer propios intereses

De esta forma, llegan a la conclusión de que los patronos de la Fundación, con algunas excepciones, en la medida en que «bien porque eran consejeros del Elche, en el respectivo momento temporal, bien porque, a pesar de no serlo, en dicho momento, lo habían sido con anterioridad, pero seguían manteniendo intereses económicos en el club y se conservaban en el cargo de patrono de la Fundación para favorecer tales intereses, formando la voluntad del consejo de administración, han participado en todo este tiempo desde febrero de 2011 en la administración y gestión del club, y ello por el poder que le confería el ser dicha institución el accionista mayoritario».

En un primer análisis recuerda el informe que la Fundación se creó en el año 2006 bajo la presidencia de José Sepulcre, como máximo responsable del consejo de administración y del Patronato. Definen su gestión como «presidencialista» y dicen que «se arrogaba un peso decisivo y determinante en relación con la mayor parte de los aspectos de la dinámica del club, y sobre todo en el terreno económico».

No obstante, la Fiscalía también afirma que junto a Sepulcre «en una primera época Ramírez y Tomás Alvarado», y posteriormente, en una segunda época, «Antonio Rocamora, tras la entrada de éste en el año 2012, han sido las figuras relevantes en la infame gestión económica del club en los años de presidencia de José Sepulcre».

El informe de los fiscales recuerda que el primer objetivo de la Fundación era «servir de formación al fútbol base de la ciudad, si bien ante la grave crisis económica que ya vivía el club en el año 2010 con ingentes deudas vencidas que ya manifestaban la necesidad de la entidad de entrar en situación concursal, la Fundación fue utilizada para inyectar capital al club por parte de la Generalitat».

Dos préstamos, uno del Banco de Valencia y otros de Bancaja por un importe total de 14 millones de euros, llegaron a la citada institución. A partir de ese momento, la Fundación del Elche CF SAD pasó a ser accionista mayoritario del club.

Esta nueva situación accionarial no ha impedido, según afirma el Ministerio Fiscal, que el club ilicitano y las decisiones en torno al mismo «hayan sido controladas en todo momento por José Sepulcre y las personas afines al mismo».

Recuerda que, por estatutos, el presidente del consejo de administración del Elche debía ser el mismo que el de la Fundación y que el primero podía designar patronos. «Ello ha determinado que durante estos años, fundamentalmente desde que pasó a ser la máxima accionista, que los patronos hayan sido en prácticamente su totalidad personas que o bien eran o habían sido con anterioridad (pero que seguían manteniendo intereses económicos con la entidad) consejeros y ello como forma de asegurar que la Fundación y sus patronos en ningún momento iban a poner traba alguna a la gestión del club, aprobándola en todo momento en las juntas de accionistas, delegando su voto en la figura de quien era al mismo tiempo presidente del consejo y de la Fundación».

Dos tipos de patronos

En la lista de patronos que participaban en la gestión del Elche en los términos expuestos figura: Sepulcre, Ramírez, Manuel y Antonio Rocamora, García Hita, Oliver, Anguix, Sánchez, Lorenzo Campos, Irles, Abadía, Vicente Javaloyes, y Ramón Segarra, quien ha ostentado la condición de secretario de la Fundación desde 2015 hasta la fecha «sin voto en la misma, pero con voz y con un peso decisivo». Por su parte, Daniel Rubio, Anselmo Navarro, José Antonio Antón, Juan Serrano y Cristina Martínez, por su actitud crítica con la gestión del club, quedan liberados de las acusaciones del Ministerio Fiscal.

Finalmente, apuntan que tras la marcha de Juan Anguix, la figura de Sepulcre «ha permanecido en la sombra ya durante la situación concursal del Elche, dirigiendo los designios de este para salvaguardar sus intereses económicos incluso frente a los del propio club y procurarse la oportunidad de volver de nuevo a presidirlo asegurándose en todo este tiempo la mayoría accionarial que le proporcionaba la Fundación con integrantes de la misma afines al mismo».