Vicente Mir hará realidad uno de sus sueños mañana (19 horas), en el estadio Nova Creu Alta de Sabadell. El técnico valenciano se sentará, por primera vez, en el banquillo como técnico del primer equipo del Elche, algo que ha anhelado en los últimos años y que, por distintas causas, no ha podido cumplir.

El preparador franjiverde tiene la difícil misión de devolver al conjunto ilicitano a la categoría de plata. Ya consiguió ascender al filial a Segunda B y ahora tiene la difícil misión de llevar al Elche de nuevo al fútbol profesional.

Al frente del Ilicitano estuvo tres temporadas (2012-2015) y, además, como jugador, vistió la franja verde en tres campañas (1992-1995), todas ellas en Segunda B y en ninguna pudo ascender. Por lo que tiene una espina clavada que espera sacarse.

Mir reconoció ayer, en su rueda de Prensa, previa al choque en Sabadell que será un encuentro que nunca olvidará. «Para mí es un partido especial. Estuve aquí tres años como jugador y luego tres años como técnico del filial. En su día no pude entrenar al primer equipo y estoy muy ilusionado porque el Elche es un club muy grande», comentó.

El técnico valenciano sabe que los focos le van a apuntar, pero no se esconde a la hora de asumir el papel de favorito. «Ya dije que nuestro primer objetivo es quedar entre los cuatro primeros y luego intentar ser campeones para tener más posibilidades en la eliminatorias por el ascenso. Si digo que no estamos preparados para ello, me estaría equivocando. Tenemos que estar arriba, aunque sabemos que vamos a tener rivales fuertes como el Mallorca o el Hércules, que tienen tan buenas plantillas como la nuestra. Además, el Atlético Baleares también ha hecho un buen equipo, están el Sabadell, los filiales, el Alcoyano... vamos a tener competencia».

El entrenador del Elche se muestra satisfecho con la plantilla que tiene a su disposición. «Estoy muy contento. Tenemos muchas posibilidades y algunos futbolistas de los que han llegado eran importantes en sus equipos y, a lo mejor, el domingo no juegan. Estoy encantado con lo que tengo y estoy convencido de que podemos ofrecer un rendimiento muy grande».

Al mismo tiempo, reconoce que la presión les motiva siempre y cuando no sea más de la prevista. «El futbolista siempre tiene que tener una pequeña presión. Mucha presión no es buena, pero sí tener alguna. Lo importante es que el jugador salga a divertirse porque, si lo hace, rinde más y luego llega la intensidad y las ganas».

El preparador franjvierde reconoce que lo importante es ser un equipo. «Tenemos que ir con mucha humildad, trabajar en equipo y con la calidad que tenemos, debemos salir a ganar en todos los campos», advirtió.