Diego García, presidente del Elche, ha confesado esta mañana que el exconsejero Jaime Oliver "es pasado" y por tanto no está dispuesto a responder a lo declarado hoy en este periódico en el que afirma que el máximo dirigente franjiverde ha dejado a caer al equipo a Segunda División B y se ha puesto en manos de Quique Pina para la contratación de jugadores con la llegada de Jorge Cordero, como director deportivo.

García insistía en que "es el pasado del club" y prefiere centrarse en una temporada que "va a ser muy importante para la entidad y del pasado no vamos a seguir hablando porque no viene bien ni al Elche, ni tampoco a las personas. Si tiene algo que denunciar, si cree que ha existido algo irregular tiene los juzgados para hacerlo y ahí podrá dirimirse todo lo que él denuncia. Repito, Jaime Oliver es pasado en el Elche y nosotros tenemos que mirar hacia adelante".

Seguidamente, García ha insistido en la idea de que "es falso que haya existido un distanciamiento con Sepulcre" por el nombramiento del director deportivo Jorge Cordero. "La relación es normal y amable y hace poco estuvimos hablando con él para fijar el presupuesto de la próxima campaña", sentenciaba.

Acuerdo con la Seguridad Social

Diego García ha confesado también que el Elche ha llegado a un acuerdo con la Seguridad Social por el que el club debe hacer un pago inmediato de 15.000 euros y después abonar 6.000 euros al mes durante 5 años para saldar su deuda. Ahora falta por cerrar con Hacienda. Durante la primera quincena de julio se espera que todo llegue a buen puerto ya que en los próximos días "se deben retocar las negociaciones porque los pagos deberán ser inferiores" a lo fijado en abril en un preacuerdo. El descenso a Segunda B ha obligado a ello.

Recurrir el descenso administrativo

El Elche CF ha recurrido a la Audiencia Nacional el descenso administrativo que sufrió de Primera a Segunda en el verano de 2015 y que fue confirmado hace unas semanas por el Juzgado de lo Contencioso tras la resolución del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD).

El club ilicitano reitera la readmisión en la competición y una compensación por parte de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de 61 millones de euros por las dos temporadas en las que el Elche no ha podido competir en Primera.

"Vamos a defender los intereses del club hasta las últimas consecuencias", ha indicado esta mañana Diego García a la Prensa en el estadio Martínez Valero.

El dirigente, que no espera el fallo del Supremo antes de seis meses, recordó que el descenso administrativo dejó a la entidad en una situación "muy delicada".

"No vamos a decir que el descenso de este año es provocado por aquel, pero el club sí que entró en una situación de nervios y de descontrol que provocó conflictos y que no exista la paz social", argumentó García.

El equipo ilicitano, que acabó la competición 2014-15 en decimotercera posición, fue descendido en junio de 2015 por el incumplimiento de la normativa con la Agencia Tributaria y haber incurrido en repetidos impagos.

"Nuestro certificado positivo de Hacienda, que se obtuvo antes de la resolución del TAD, es anterior al de otros clubes y la auditoría se realizó en un tiempo diferente al de otros equipos", insistió.

García defendió que los tiempos no fueron los mismos para el Elche que para otros clubes, por lo que entiende que como dirigente del equipo ilicitano no puede "más que seguir apelando".