El Elche de la presente temporada se acostumbrado a salir a flote cuando peor tiene las cosas y está con el agua al cuello. La victoria del pasado viernes en Tarragona es un ejemplo más. El conjunto de Toril es capaz de dar su mejor versión en los momentos críticos de la temporada, como ya ha demostrado, hasta en cuatro ocasiones, en la presente Liga.

La primera de ellas fue en la jornada séptima. Los franjiverdes visitaron El Alcoraz de Huesca después de empatar a domicilio ante el UCAM de Murcia (1-1) y perder, de forma contundente, en el Martínez Valero, contra el Lugo (0-3), en uno de los peores partidos de la temporada.

Los ilicitanos, tras un buen comienzo de campeonato, en el que habían mostrado un juego brillante, sobre todo en casa, ante Rayo Vallecano y Tenerife, comenzaban a sembrar dudas. Pero las disiparon de un plumazo con un holgado triunfo en tierras oscenses (0-3), que devolvía la ilusión a la afición.

Poco después se repitió la historia. El Elche visitaba el estadio de La Romareda de Zaragoza tras perder en casa con el líder Levante (0-1), caer en Alcorcón (1-0), con una mala imagen; y empatar, in extremis, como local frente al Nàstic (4-4), cuando ganaba 3-1 y los catalanes se pusieron 3-4 con tres goles en ocho minutos.

Parecía que los franjiverdes iban a hincar la rodilla ante el potente Zaragoza y entrar en la primera crisis de la temporada. Pero el equipo de Toril volvió a mostrar su mejor cara y logró el triunfo en la capital aragonesa, con un convincente (1-3).

El tercer momento difícil de la temporada fue antes del desplazamiento a Reus. Los ilicitanos necesitaban ganar para no pasar una malas navidades. Habían perdido en Miranda de Ebro frente al Mirandés (1-0) y empatado en casa contra el Getafe (2-2). En un choque marcado por la lluvia, los franjiverdes supieron ponerse el mono de trabajo y sumar tres puntos (0-1), con un gol de Guillermo, que permitió a la plantilla disfrutar de más vacaciones y tener un parón navideño tranquilo.

La antesala de la visita a Lugo también fue complicada. La derrota en Tenerife (2-0) y el empate, en el último instante, en el Martínez Valero, con el penalti de Armando, contra el UCAM (1-1) volvió a encender las alarmas. Pero, de nuevo, el equipo respondió y ganó en el Anxo Carro (1-2) con una buena imagen.

Y la última ocasión fue el pasado viernes en Tarragona. Un mal resultado hubiera complicado mucho el futuro del Toril. Pero, una vez más, y van cinco, el Elche despejó la tormenta con tres goles y una exhibición en apenas 30 minutos (1-3).

Notable a domicilio

El conjunto ilicitano está mostrando su mejor cara a domicilio. Con tres cuartas partes de Liga cumplida, ha sumado cinco victorias fuera de casa, las mismas que como local. Unos registros que le permiten igualar el número de triunfos como visitante de la temporada pasada a falta de 12 jornadas.

Los franjiverdes todavía tienen que jugar en Córdoba, Valladolid, Mallorca, Getafe y Oviedo, por lo que de seguir en la misma línea, superarían con creces los números de la pasada campaña fuera de casa.

Además, el Elche es el tercer mejor equipo de Segunda División si sólo contaran los puntos sumados a domicilio. Los ilicitanos han logrado 18, sólo dos menos que en casa.

Un balance que nada más superan los dos primeros clasificados: Levante y Girona, que van disparados hacia Primera División. Incluso, los franjiverde han sumado lejos del Martínez Valero dos puntos más que el Cádiz, tercer clasificado.

Ahora, el conjunto de Alberto Toril debe demostrar que no sólo es capaz de sacar su mejor versión cuando está con el agua al cuello. Los ilicitanos necesitan mantener una regularidad y acumular una racha de buenos resultados y buena imagen durante varios partidos consecutivos para poder recuperar la ilusión de su afición y seguir soñando con el play off.