Rubén Baraja, entrenador del Elche, avisa que el Real Oviedo le va a exigir «muchísimo» al sus jugadores en el partido que se jugará el domingo (12 horas) en el Martínez Valero. El preparador franjiverde entiende que va a ser un duelo «atractivo, de los que todos queremos jugar». «Es un rival histórico y estamos en buen momento, por lo que es un partido para disfrutar», apunta Baraja

El entrenador franjiverde asegura que el Oviedo tiene «la misma capacidad que nosotros para tener la pelota», por lo que anuncia «una lucha por tener el balón y ser su dueño. El Oviedo es un equipo con poderío y músculo que vuelve a Segunda con un equipo competitivo y el mismo entrenador, y eso es una ventaja».

«El planteamiento es sumar tres puntos y ser sólidos en casa, que es lo que luego te da la regularidad y la estabilidad», explica el preparador, quien dice que su plantilla mantiene los pies en el suelo «porque también está convencida de nuestro momento y de la situación que vivimos».

Baraja niega, sin embargo, que pueda ser una presión añadida para su equipo estar arriba de la clasificación. «Al revés, miramos el presupuesto cada día y estar ahí es un ánimo y una confianza», dice.

El técnico se muestra ilusionado ante el reto de intentar recuperar «la masa social del Elche» y a pesar de dar por positivo el dato de 12.000 abonados indica que «queremos más. Sabemos que la afición es el mejor activo del club».