El nuevo consejo de administración del Elche ha prescindido de Antonio Rocamora como secretario general del club ilicitano. Una vez que ya se han puesto al día todos los directivos del funcionamiento de la entidad, el nuevo órgano rector ha concedido «vacaciones» a Rocamora, quien tiene un contrato con el Elche hasta el 30 de junio y que percibía unos emolumentos que superaban los 6.000 euros mensuales y más de 70.000 anuales. Rocamora tiene pendiente de cobro varios meses -a los empleados se les ha ido poniendo al día, pero a él no- y los dirigentes tienen que llegar a un acuerdo, aunque se espera que no haya ningún problema para que firme el finiquito. Además, el ya exsecretario general, se comprometió tras el relevo a dejar su puesto como patrono de la Fundación, pero todavía no ha enviado su carta de renuncia, aunque se confía en que se produzca en los próximos días. De esta forma, se pondrá fin a la etapa de Antonio Rocamora como uno de los hombres fuertes del club ilicitano durante los últimos años.
