El juez de Disciplina Social de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) ha impuesto una multa de 90.000 euros al Elche CF y la inhabilitación de José Sepulcre como presidente del club ilicitano por 18 meses como consecuencia del desfase presupuestario realizado por la entidad ilicitana de 6,5 millones de euros. La inhabilitación puede hacerse extensible a todo el consejo de administración, pero ese aspecto todavía no está claro porque se han recibido dos resoluciones, según afirman desde la propia entidad, y las están analizando los abogados del club. En una de ellas se habla de inhabilitar a Sepulcre por 12 meses.

Al Elche le habían permitido gastarse 12,5 millones en la confección de la plantilla de la temporada pasada en Primera División, la 2013-2014, y llegó a los 19 sin tener la autorización de la patronal del fútbol. En el desfase van incluidos los 2,5 millones que se deben pagar a la plantilla franjiverde como prima por conseguir la permanencia en la Liga BBVA, que todavía no se han hecho efectivos.

La notificación llegó al club el pasado viernes y ahora el Elche tiene por delante 15 días para recurrir la resolución.

El club reconoce que existió dicho desfase en la confección de la plantilla y con esa medida sólo se buscó «seguir vivos en Primera como así ocurrió». Lo que no se comparte con el juez es el hecho de que «hable de irregularidades en la contabilidad del club, cuando todavía no se habían cerrado los presupuestos. Ellos vieron los números en verano y, nosotros cerramos las cuentas en noviembre y las presentamos de forma correcta en la Junta General de Accionistas que realizamos en el mes de diciembre y en las que se especificaba la desviación económica de forma correcta».

Como se informó en estas páginas, la Liga de Fútbol Profesional detectó el pasado verano varias irregularidades en las cuentas del Elche tras una auditoría realizada por el Consejo Superior de Deportes en el club que preside José Sepulcre. La comisión deportiva que comandaban entonces Antonio Prieto y Jesús de Huertas, tal y como reconoció en su día el mandamás franjiverde, gastó más de la cuenta el curso anterior «para evitar caer a Segunda después de tantos años lejos de la élite». Ante esta situación, el estamento futbolístico abrió un expediente al Elche a través de su juez que ahora ha finalizado con una multa de 90.000 euros y la inhabilitación de Sepulcre.

«Las alegaciones las están preparando nuestros abogados y todo puede quedar solucionado. Estamos dispuestos a pedir la cautelar y recurrir la sanción hasta las últimas instancias. De momento vamos a ir al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). No vamos a quedarnos con los brazos cruzados. Todo viene a consecuencia de lo que dijo el presidente. El miedo escénico a la Primera División nos llevó a gastar más de la cuenta», insistían ayer fuentes del club antes de intentar aclarar que «todo lo que se hizo era por el bien del club y lo estamos pagando esta campaña en la que no nos han dejado fichar y contamos con una plantilla escasa en efectivos».

Esta situación ya la ha dejado entrever varias veces el técnico Fran Escribá en sus distintas comparecencias ante los medios de comunicación, poniendo el dedo acusador en la anterior comisión deportiva, que contó con el beneplácito del presidente.

Con esos números negativos, al Elche se le impidió hacer fichajes y el director deportivo Víctor Orta ha estado atado de pies y manos a la hora de confeccionar el grupo de la temporada 2014-2015. Gracias a que la plantilla aplazó el 12% de su salario a la próxima campaña se pudieron dar de alta las fichas de Víctor, Cristian Herrera y Enzo Roco, a los que no se les permitió jugar el primer partido de Liga que el Elche jugó en esta temporada ante el Barcelona.

La LFP, desde la llegada de Javier Tebas a la presidencia, pretende instaurar en el fútbol español la transparencia económica y está obsesionada con el control absoluto de las cuentas de los clubes. Cuando se detectó el desfase económico al Elche la patronal del fútbol decidió cerrar el grifo al equipo ilicitano en el capítulo de fichajes y ya no pudo reforzarse en el final del mercado de verano, ni mucho menos en el de invierno. Incluso, no pudo dar de alta al congolés Mudingayi que estuvo entrenando dos meses.

Señalar, que en la reunión mantenida recientemente por Javier Gómez, dirigente de la LFP, con miembros del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) y del Ayuntamiento de Elche, que estuvo representado por la alcaldesa Mercedes Alonso y el edil de Deportes Daniel Rubio, ya se informó que la situación del Elche era límite.

Proceso concursal

Por otra parte, el Elche ha dado los primeros pasos para iniciar el proceso concursal. En ese sentido, el club ya ha presentado la documentación necesaria para formalizar el preconcurso, primer paso para llevar la iniciativa en el proceso. La deuda de la entidad supera los 40 millones de euros y, dado que no ha llegado el tan cacareado préstamo que repetidamente ha puesto el consejo como escudo, el único camino posible es meter al Elche en el proceso concursal, cuyo camino ya se ha iniciado. El Elche necesitaba a corto plazo una ampliación de capital que girara sobre los 13 millones, algo inviable.