Los integrantes de la plantilla del Elche coincidieron en considerar que la derrota de la pasada jornada, contra el Salamanca (5-4), fue un "accidente" y que, pese a perder después de ir por delante en el marcador, el resultado no les va a "pasar factura".

Kike Mateo, que, tras la sanción que le impidió jugar en Salamanca volverá al equipo ante el Alcorcón, ha dicho que "las sensaciones que transmitió el equipo fueron muy buenas, pero se dio algo raro, porque perder como se perdió pasa muy pocas veces", en referencia a que el Elche cayó derrotado después de ir ganando por 2-4.

El media punta murciano aseguró que, pese a que el equipo tenía bajas importantes, dio la cara en Salamanca, pero no puedo ganar. "No hay que darle más vueltas. Es un partido perdido y ahora hay que ganar al Alcorcón", agregó.

Por su parte, Jesús Perera consideró que el Alcorcón es un rival incómodo porque con la permanencia asegurada, tiene poco que perder. "En el Martínez Valero pueden tener una de sus últimas opciones de engancharse a la promoción, aunque de visitante baja mucho su rendimiento", agregó.

El jugador extremeño afirmó que, pese a la derrota de la semana pasada, la situación del conjunto ilicitano es buena, aunque si hubieran ganado estarían a ocho puntos del equipo que "marca el corte".

"Dependemos de nosotros y si ganamos al Alcorcón estaremos más cerca del objetivo", dijo el delantero, quien aseguró que su equipo necesita "a todo el mundo" en la recta final del campeonato,

"Todos tenemos que estar preparados", dijo Perera, quien pidió a la afición ilicitana que acuda en masa al Martínez Valero para apoyar al equipo contra el Alcorcón.

Perera quiere ser importante en esta recta final de temporada y su gol en Salamanca le ha venido bien, porque "cuando un delantero no juega, volver y marcar sirve para recuperar sensaciones".