Las bajas cifras de facturación que se están consiguiendo, a pesar de la vuelta a la actividad tras el covid-19 y de la entrada en la denominada nueva normalidad, están llevando a que nuevas empresas opten por solicitar la suspensión temporal de empleo para la totalidad o una parte de sus plantillas, con el objeto de reducir sus costes. Así, sólo en la última semana se han presentado en la pronvincia 47 nuevas solicitudes de ERTE, con un total de 652 trabajadores afectados, según el balance remitido este lunes por la Conselleria de Economía sostenible.
Unas nuevas solicitudes que, además, durante la semana pasada se registraron en todos los sectores. En los servicios se han presentado 25 nuevas peticiones de ERTE; la industria ha sumado 19; en la construcción se han solicitado dos nuevas suspensiones de empleo; y en la agricultura, una.
Con estas nuevas solicitudes, el total de ERTE que presentados en la provincia desde que se decretara el estado de alarma el pasado mes de marzo ya alcanza los 25.978, que han afectado en algún momento a un total de 132.758 trabajadores, aunque buena parte de ellos ya han regresado a sus empleos, a medida que los negocios han reabierto sus puertas. A esta cifras, además, hay que sumar la parte correspondiente de los 848 ERTE que ha tramitado directamente la Dirección General de Trabajo por afectar a empresas implantadas en más de una provincia, y que han afectado a 77.020 profesionales en toda la autonomía, de los que el Consell no detalla su distribución.
En cuanto al grado de resolución, hasta la fecha la Generalitat ha dado luz verde a 25.011 ERTE en la provincia de Alicante, lo que supone el 96,2% del total.
El Gobierno y los agentes sociales han acordado la prórroga de los ERTE por fuerza mayor hasta septiembre, aunque ya se habla de la posiblidad de mantenerlos en determinados sectores hasta fin de año. Además, las empresas también pueden recurrir a los ERTE por causas económicas, organizativas o de producción.
