Los empresarios están muy enfadados después de que más de la mitad de la Comunidad Valenciana no haya podido iniciar hoy la fase I de la desescalada, con las consecuencias económicas que acarrea, y no están dispuestos a que se vuelva a repetir. En un contundente comunicado, la patronal autonómica, la CEV, ha denunciado la "falta criterios claros" y de una "mayor transparencia en el proceso de desescalada" del confinamiento por Covid-19 ; y ha lamentado que "la falta de rigor y certidumbre, y las discrepancias entre el gobierno central y el autonómico castigan una vez más a empresas, autónomos y ciudadanos".
Así lo ha señalado la organización que preside Salvador Navarro en un escrito remitido a los medios, en el que también exige "mayor certidumbre y que se tomen todas las medidas necesarias para cumplir los criterios que permitan a toda la Comunidad pasar ya a la fase I".
La CEV recuerda que "las expectativas generadas por el Consell" y el escaso margen de maniobra que deja a empresas y autónomos el hecho de que los anuncios de cambio de fase por parte del Gobierno se realicen con apenas 48 horas de antelación, motivaron que muchos negocios de la Comunidad invirtieran en acopio de material y materias primas, en la adaptación de los locales a las nuevas medidas de seguridad a las que están obligados, y principalmente en la incorporación de una parte de la plantilla incluida en los ERTE que en estos momentos "sigue sin poder trabajar", según recalca la patronal, que señala que "la Administración central y autonómica, deben ser conscientes de las consecuencias que sobre le economía tiene la falta de claridad y de rigor".
Ante esta situación, la CEV demanda que se den "todos los pasos necesarios" para que la Comunidad Valenciana pueda pasar a la Fase I. Además, exige criterios objetivos, públicos y compartidos para todas las autonomías. También, "conocer con exactitud en qué ha fallado la Comunidad Valenciana y que se pongan todos los medios necesarios para no volver a hacerlo".
Además, insiste en la necesidad de que no se generen falsas expectativas, para evitar que se tomen decisiones que "perjudican sobremanera a empresas y autónomos que atraviesan una situación extrema". Igualmente, los empresarios reclaman que las cuestiones políticas "no primen sobre las cuestiones objetivas en la toma de decisiones"; y también solicitan una norma que aclare la situación y los procedimientos a seguir en el caso de las empresas a las que la falta de actividad les impide hacer efectiva la incorporación de los trabajadores afectados por un ERTE durante la vigencia del mismo.
En este sentido, la patronal "urge" a que se tomen las medidas necesarias para que la Comunidad Valenciana cumpla con todos los criterios exigidos por parte del Ministerio de Sanidad y que se reconsidere la posibilidad de cambiar de fase por el bien de los ciudadanos y de la economía valenciana. Así lo ha hecho saber al president de la Generalitat y lo hará próximamente al presidente del Gobierno en una carta que recoge el "profundo malestar" del empresariado valenciano por su falta de transparencia y por negarse a reconsiderar una decisión que de nuevo perjudica a la Comunidad Valenciana.
