Las consecuencias económicas derivadas de la crisis del coronavirus en el tejido empresarial están teniendo una mayor incidencia en las firmas de menor tamaño. Además, muchas de ellas, encuadradas en los sectores de la hostelería y el comercio, han tenido que cerrar sus puertas, a excepción de las que presten servicios básicos, en el caso de los establecimientos comerciales, por la declaración del estado de alarma. Una circunstancia que está haciendo mella en sus economías, dado que afrontan un periodo sin ingresos, pero durante el que tienen que asumir gastos fijos. Esta situación es la que viene a reflejar el barómetro de opinión hecho público por la patronal de las pymes (Cepyme) en el que han participado más de 350 compañías de la Comunidad Valenciana, según la información facilitada por la patronal autonómica CEV. En este contexto, una de las principales conclusiones de este indicador es que más del 52% de las pequeñas y medianas empresas de la Comunidad Valenciana considera que no podrá mantener el empleo dentro de seis meses y sólo el 40% cree que lo podrá hacer después de un año.

Además, un importante grupo de pymes, el 84%, asegura que, si esta crisis se prolonga en el tiempo, estaría en riesgo la supervivencia de su empresa y el 75% califica de negativas o muy negativas las medidas adoptadas por el Gobierno en relación con la crisis del Covid-19.

Los principales factores a los que los encuestados atribuyen la situación por la que atraviesan en estos momentos son la falta de demanda, el cierre por obligación legal, la imposibilidad de llevar a cabo la actividad y la falta de suministros.

Una enumeración de causas que han generado una reducción del volumen de ingresos por parte de las empresas. Además, las pymes de la Comunidad Valenciana también muestran su preocupación por la falta de liquidez, el incremento de la morosidad y la probable pérdida de clientes, una vez que se supere la crisis.

Un temor muy acentuado en las empresas del comercio o de la hostelería ante la incertidumbre de no saber cuándo podrán reanudar su actividad y cómo responderá el consumidor. En cuanto al aspecto económico y financiero, el barómetro de Cepyme refleja que un 46% de las pequeñas empresas calcula que para poder salir adelante necesitará una inyección de liquidez por valor de entre un 10% y un 20% de su volumen de facturación anual, mientras que un 33% estima que, incluso, superará el 20% del volumen de facturación. Ante la falta de liquidez, el 51% ha solicitado financiación con aval del Estado.

Denegación de préstamos

Sin embargo, el 27% asegura no haber conseguido esa financiación y un 47% declara que la tramitación ha sido complicada. Por otra parte, preguntadas por las medidas que consideran que el Ejecutivo debería aprobar para poder salir de la crisis actual, las pymes citan como importantes la suspensión de obligaciones tributarias y las cotizaciones sociales de las empresas y autónomos hasta el 31 de octubre; aprobar ayudas económicas directas a las pymes; reducir las cotizaciones a la Seguridad Social y la carga impositiva.

El presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, consideró ayer que es necesario el apoyo del Gobierno a las pymes, dotándolas «de la liquidez necesaria para asegurar su supervivencia y acompañarlas en el camino para superar la crisis generada por el coronavirus». Un apoyo «imprescindible para, pasada la alerta sanitaria, crear riqueza y empleo, soportar los costes sociales y contribuir con sus impuestos a la recuperación», subrayó Navarro.

BBVA Research prevé una caída del PIB del 8% este año por la crisis del Covid-19

El servicio de estudios de la entidad estima que la tasa de paro escalará al 20,5% y se destruirán 970.000 empleos

BBVA Research prevé que el PIB podría caer alrededor de un 8% de media este año como resultado de las medidas implementadas para frenar el contagio del coronavirus y de la incertidumbre generada por la pandemia. Pero también estima que la economía española podría crecer una media del 5,7% en 2021, aunque cree que no se alcanzará el nivel previo a la crisis hasta 2022.

En el informe «Situación España» del servicio de estudios de la entidad financiera correspondiente al segundo trimestre, también se incluyen las previsiones sobre la evolución del desempleo. Y en este caso, calcula que la tasa de paro escalará al 20,5% este año, con una destrucción de 970.000 puestos de trabajo respecto a sus anteriores previsiones de enero, y bajará al 17,3% el próximo. Por su parte, pronostica que el déficit público se disparará al 11% del PIB este año y al 6,7% el siguiente, con un nivel de deuda pública del 115,8% y del 114,8% del PIB en cada caso. El informe fue presentado ayer por el director de BBVA Research y economista jefe de Grupo BBVA, Jorge Sicilia; el responsable de Análisis Económico de BBVA Research, Rafael Doménech; y el economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso.

Sobre la evolución del PIB, BBVA Research prevé que caiga entre un 5,5% y un 10,5% este año (un 8% de media) y que crezca entre un 4,2% y un 7,2% en 2021 (un 5,7% de media). Los promedios previstos en las tasas de variación corresponderían a un escenario de confinamiento de unas ocho semanas y en el que la normalización comenzaría en la segunda quincena de mayo. Los pronósticos del impacto de la crisis del Covid-19 de BBVA Research, que en enero preveía un crecimiento del 1,6% en 2020 y del 1,9% en 2021, se sitúan en la media de lo previsto por otros organismos, como el Banco de España, que el pasado lunes cuantificó la caída del PIB este año entre el 6,6% y el 13,6%, y coinciden con el del FMI, que la cifró también en un 8% la semana pasada. No obstante, Sicilia indicó que las previsiones se hacen en un entorno de «elevada incertidumbre», sobre todo en relación con la duración de las restricciones impuestas y el diferente impacto por sectores.