El desempleo de larga duración (es decir, las personas que están más de un año en el paro) se situó en el 44% respecto al total de parados en la Comunidad Valenciana en 2019, frente al 59,7% que marcó en 2013, según un estudio de la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (Ivie). Es decir, ha bajado más de 15 puntos en seis años.

La cifra se sitúa levemente por debajo del nivel estatal, donde el paro de larga duración llegó al 44,3% en 2019, porcentaje que se ha reducido 17,5 puntos desde 2014, año en el que rozó el 62%. Además, la Comunidad es la octava región con menor porcentaje de paro de larga duración.

En España, el estudio señala que dentro del grupo de parados de larga duración los que llevan cuatro años o más en el desempleo son los que tienen un mayor peso, un 18,1%; seguido de los que llevan en paro entre dos y cuatro años (12,4%); los que llevan entre un año y año y medio (8,4%); y los que llevan en desempleo entre un año y medio y dos años. En total, en 2019 había casi 1,5 millones de parados de larga duración, frente a los 3,5 millones registrados en 2013. Para los autores del estudio, este «abultado» volumen de desempleados de larga duración, a pesar de haberse reducido durante la recuperación, «parece indicar una cierta persistencia de este tipo de desempleo». En este sentido, en el estudio se advierte de las consecuencias del paro de larga duración tanto desde el punto de vista económico como social. «El desempleo de larga duración es una puerta de entrada a la pobreza y exclusión social, al aislamiento y empeoramiento de la salud mental del parado», alerta el estudio, que urge a tomar medidas para facilitar la reinserción laboral de los parados.