Los negocios no siempre acaban bien. En ocasiones, lo que parecía una buena oportunidad se tuerce y es mejor rectificar a tiempo. Así lo creen, al menos, en el grupo alicantino Suavinex, que ha optado por liquidar Baby Now SL, la filial que tenía dedicada a la fabricación y comercialización de carritos de bebé, tronas y minicunas -una compañía que adquirió hace menos de cinco años-, al no haber conseguido los resultados esperados. La decisión supone, además, su salida del mercado estadounidense, dado que ésta era la única firma del grupo que tenía representación en ese país.

Los propios responsables de Suavinex confirmaron ayer la noticia después de que el Boletín Oficial del Registro Mercantil publicara el inicio del proceso de liquidación de la firma y su disolución. De este modo, el grupo centrará sus esfuerzos en seguir creciendo en el apartado de puericultura ligera -chupetes, biberones, mordedores- y en los productos de cosmética para el cuidado de la piel del bebé y la madre, según explicaron desde la firma.

La entrada de la compañía de la familia Lubián en el accionariado de Baby Now se produjo en el año 2015, cuando sus responsables consideraron que era una buena oportunidad para introducirse en un nuevo segmento de mercado en el que no estaban presentes, el de la denominada puericultura pesada, aprovechando la salida de uno de los socios anteriores de la firma. Al respecto, Baby Now, radicada en Cataluña, había conseguido hacerse un pequeño hueco especialmente en el negocio de los carros de bebé, donde llegó a plantar cara a los grandes del sector con sus modelos Así, la facturación de la compañía alcanzó los 3,3 millones en el 2013. Adicionalmente, la compra permitía a Suavinex poner un pie en Estados Unidos, un mercado especialmente complejo para empezar desde cero y donde la alicantina todavía no tenía presencia.

Sin embargo, el negocio no acabó de cuajar y la compañía, que ya estaba en números rojos cuando Suavinex la compró, no logró remontar la situación y siguió acumulando pérdidas. Así, en 2016 cerró con un resultado negativo de más de 937.000 euros; en 2017 fueron unos 468.000; y en 2018, cuando se tomó la decisión de cesar la actividad, ya eran 1,2 millones, según las últimas cuentas consolidadas que ha presentado el grupo. Según relatan las fuentes consultadas, tampoco favoreció la situación el hecho de que el responsable de la división norteamericana se marchara a otra compañía, lo que dejó descabezada a la filial en este país, ni las diferencias de criterio que mantuvieron con el fundador de la firma.

En cualquier caso, desde la empresa alicantina minimizan el impacto del cierre de esta filial y señalan que la experiencia les ha servido para adquirir el «know how» en este nuevo segmento, al que no descartan regresar en un futuro, según fuentes oficiales del grupo empresarial.

De momento, eso sí, los planes del grupo pasan por seguir potenciando aquellas líneas en las que ya son fuertes, además de su nueva gama de productos tecnológicos, como los humidificadores que ya venden en su web y que funcionan con Alexa y el asistente de Google. En cuanto a los mercados geográficos, Suavinex quiere focalizar sus esfuerzos en seguir creciendo en España -donde, además de su marca propia, también fabrica para Mercadona-; además de Italia, Francia, Corea y China, donde la firma cambió en 2018 su estrategia y optó por vender sus productos a través de un único distribuidor. El grupo también mantiene su apuesta por los productos bucodentales y cremas con agua de mar a través de la filial Blue Sea Laboratories.