El Gabinete de Estudios de la Cámara ha realizado un informe acerca de la situación y perspectivas de la economía alicantina en lo que llevamos de año. Del documento se desprende que la provincia ha crecido a unos niveles mucho más moderados que en años anteriores, lo que va en la línea de lo que avanzan los analistas de desaceleración de la economía europea. En este sentido, la provincia continúa creando empleo, aunque a un ritmo más moderado que en años anteriores, especialmente en la industria, y la exportación pierde impulso. En la construcción también se percibe una desaceleración, aunque las tasas de crecimiento siguen siendo altas (5,8%).

No en vano, la exportación alicantina se ve lastrada por la caída de las exportaciones industriales (-0,5% en los ocho primeros meses del año). La exportación de productos agrícolas, por el contrario, se incrementa un 6%. El reducido avance de las exportaciones (0,7%) y el aumento de las importaciones (8,4%) provocan un descenso del superávit comercial que alcanza un valor de 539 millones de euros (210 millones de euros menos que en el mismo período del año anterior).

En paralelo, se espera una desaceleración del gasto en consonancia con un ritmo de creación de puestos de trabajo más moderado. Finalmente, mientras la inversión residencial muestra una moderación del crecimiento, el turismo va bien.