El Ministerio de Fomento ha sacado a licitación los servicios de asistencia técnica para la obras de conservación y explotación del tramo de la AP-7 que afecta a la provincia de Alicante, una vez que el próximo 1 de enero el Estado rescatará la actual autopista de peaje que pasará a ser gratuita. El presupuesto base de licitación es de 1.777.720,56 euros, según el pliego publicado. La tramitación es urgente y el plazo para presentar ofertas finaliza el próximo 10 de diciembre.
En este contrato se incluyen el tramo de la red de carreteras del Estado entre Alicante y Ondara y el de El Campello y El Verger, según detalla el documento.
La futura contrata tendrá que realizar distintas actuaciones para el mantenimiento de los viales. Y una de las primeras obras, antes de que la infraestructura se convierta en la futura «autovía» A-7, consistirá en la eliminación de los elementos y barreras que ahora conforman las zonas de peaje y la sustitución por otros, una vez que el 31 de diciembre la autopista pase a manos del Estado y el vial se convierta en una autovía tradicional gratuita. El plazo de ejecución de estas actuaciones es de dos años.
Además de este pliego, el Ministerio de Fomento ya licitó en octubre la gestión de las áreas de servicio entre Cataluña y Alicante, que en esta provincia incluía las gasolineras de San Antonio y La Marina.
Por otra parte, ante el final de la concesión, la actual adjudicataria de la AP-7 en Alicante, Aumar, filial del grupo Abertis, ha iniciado con los sindicatos la negociación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para los operarios del cobro de peaje, que en Alicante serían 35, de una plantilla de más de 60 trabajadores directos en la provincia, según estiman los sindicatos. El resto de operarios no incluidos en el ajuste laboral está previsto que se subroguen al contrato que firme el Ministerio Fomento.
