El grupo Cajamar cerró el tercer trimestre del año con un beneficio neto consolidado de 82 millones de euros, un 17,2% más que en el mismo periodo de 2018, impulsada por el aumento del volumen de negocio y una contención de los costes. Así lo ha señalado la entidad cooperativa este viernes, que destaca la importante captación de recursos minoristas que ha conseguido.

Así, los activos totales en balance registran un crecimiento interanual del 6,8% hasta los 45.621 millones de euros y el volumen total de negocio gestionado se sitúa en 77.168 millones de euros, un 3,6% más.

Por su parte, los recursos minoristas crecen el 8,7 %, con especial protagonismo de las cuentas a la vista, que lo hacen un 13%. Del mismo modo, el ahorro invertido en fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de ahorro se incrementa un 3,7%.

Desde el punto de vista del crédito, Cajamar cerró el pasado trimestre con un saldo vivo de préstamos de 29.123 millones, un 1,4% más.

Este crecimiento del volumen del negocio, unido a una moderación de los gastos de explotación permiten, según la entidad, que el resultado antes de impuestos se eleve hasta los 111,9 millones, un 39,9% más, que se quedan en 82 millones en el consolidado neto.