El mensaje fue claro. El sector financiero no puede seguir asumiendo el coste de los tipos negativos que el BCE ha prolongado para atenuar la desaceleración económica y, tarde o temprano, deberá repercutir esta situación a sus clientes de forma «inevitable». Así de claro se mostró ayer el consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, que, eso sí, no concretó si la medida llegará a aplicarse a los clientes minoristas o cuándo se hará. Todo dependerá, según dijo, de lo que haga la competencia. De momento, la entidad ve margen para gravar los depósitos de sus clientes institucionales y de las empresas, y lo que está por ver es si se atreverá también con los particulares.
Guardiola se expresó así durante la presentación de resultados del banco, que hasta el pasado mes de septiembre obtuvo un beneficio de 783 millones de euros, más del triple que en el mismo periodo del año pasado, aunque hay que tener en cuenta que entonces las ventas de carteras inmobiliarias y los problemas en la transición informática de su filial británica hundieron los resultados hasta los 248 millones de euros. En cualquier caso, las cuentas reflejan las cada vez mayores dificultades que tienen las entidades para ganar dinero con su negocio tradicional, es decir, prestando dinero.
Así el margen de interés se contrajo un 1,1%, hasta los 2.712 millones, aunque también es cierto que en esta evolución influyó la nueva normativa. Para compensarlo, la entidad logró aumentar hasta 9,1% las comisiones, que aportaron 1.067 millones -la mayoría proceden de la venta de fondos y otros productos como seguros- y redujo a la mitad las dotaciones ante posibles impagos.
Pero la entidad tiene claro que el margen de maniobra se empieza a agotar y la prolongación de los tipos negativos del BCE suponen una presión añadida. «Hay que ir pensando en que cargar tipos negativos a los clientes por parte del sector es, hasta cierto punto, inevitable. Supongo que eso es lo que espera el gestor de la política monetaria cuando los pone, que tienen que trasladarse de alguna forma a la clientela, y eso va a producirse con una cierta prelación», señaló Jaume Guardiola. Y preguntado en concreto por los depósitos de los clientes minoristas, Guardiola se limitó a apuntar que el proceso ha empezado con los clientes financieros, seguirá con las empresas y «ya se irá viendo» en función de lo que marque la competencia.
Al respecto, el director financiero, Tomás Varela, señaló que, de momento, hay recorrido para actuar en los depósitos mayoristas, que suponen el 36% del total de los que tiene el banco. En este sentido, explicó que de los 39.000 millones que suponen estos depósitos de clientes corporativos e institucionales, solo se está gravando con tipos negativos unos 2.500 millones, por lo que apuntó que hay margen para más.
En cualquier caso, el cobro por los depósitos no es la única medida que contempla el Sabadell para ajustar sus balances. Guardiola también anunció que la entidad prevé el cierre de unas 200 oficinas a lo largo del próximo año, en línea con los recortes que están aplicando todas las entidades. Esto supondrá algo más del 10% de su red, que suma en estos momentos unas 1.850 sucursales en España.
Eso sí, el ejecutivo apuntó que los cierres no irán acompañados de un ERE y que se recurrirá a las jubilaciones y a la internalización de servicios que ahora están subcontratados para recolocar al personal. También avanzó la puesta en marcha de un nuevo modelo de oficina premium, especializada en el asesoramiento, en línea con la tendencia de todo el sector.
Guardiola despeja balones sobre la fusión con Bankia
El consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, se vio obligado ayer a pronunciarse nuevamente sobre una posible fusión de la entidad con Bankia, una operación sobre la que no cesan los rumores en el mercado. Guardiola reconoció que las fusiones tienen «lógica» ante la necesidad del sector de ajustar costes, pero aseguró que el «foco» del Sabadell «no está ahí. Está en la mejora del perfil de generación de resultados». «Tenemos mucho que hacer dentro y en estos momentos sólo estamos pensando en eso», aseguró el ejecutivo catalán.
La entidad aumenta un 11% la concesión de créditos en Alicante
El banco incrementa más de un 30% el negocio de la venta de seguros en sus sucursales de la provincia
A pesar de las importantes cuotas de mercado que ya alcanza, el Sabadell continúa incrementando sus cifras en la provincia. Según informó la entidad, que desde octubre de 2017 tiene su sede en Alicante, hasta el pasado mes de septiembre acumulaba un total de 4.021 millones en nueva financiación en la zona, lo que supone un incremento del 11% sobre el mismo periodo del ejercicio anterior. De ese total, 342 millones fueron créditos para particulares (un 12% más) mientras que las empresas tomaron prestados otros 3.679 millones, un 11% más.
En el conjunto de la Comunidad Valenciana los datos arrojan una cifra de 7.205 millones, un 8% más que el pasado año.
La concesión de hipotecas también mantuvo su tendencia positiva, con un total de 2.752 operaciones en la provincia, por un importe de 267,2 millones, un incremento del 8%. Por su parte, la financiación al consumo alcanzó los 136,4 millones.
Además, el banco destaca la buena evolución de lo que se denominan ventas cruzadas de productos, con las que consigue mejorar sus ingresos por comisiones. Es el caso de la contratación de seguros. El Sabadell cuenta ya con 156.645 clientes en la provincia en este sector, que generan primas por valor de 140,8 millones de euros, un 31,1% más que en el mismo periodo del ejercicio precedente. En total, el volumen de negocio del Sabadell por todos los conceptos suma más de 41.500 millones de euros en la Comunidad Valenciana.
