Hace un año, el conocido Plan Armanello renacía como Ensanche Levante después de que los propietarios de este suelo de Benidorm se hicieran con los mandos para desarrollar el sector a través de una Agrupación de Interés Urbanístico (AIU). En ella, se aglutinan hasta once propietarios que concentran casi el 80% del suelo por urbanizar, en el que es el mayor plan urbanístico de Benidorm en estos momentos. Uno de ellos, el empresario Alfredo García, de Bingos Reunidos, cuenta con cerca del 18% de esas parcelas, alrededor de 100.000 metros cuadrados, según las fuentes consultadas por este diario, lo que lo convierte en uno de los principales propietarios.
No obstante, es el empresario alicantino Enrique Ortiz, el que fuera hasta hace unos años el urbanizador del Plan Armanello, quien hasta la fecha, según las mismas fuentes, ostenta mayor porcentaje de suelo en este plan parcial que supondrá la expansión de Benidorm por la «malla» de Levante. Ortiz cuenta con cerca de 145.000 metros cuadrados en esta zona, lo que supone el 26% del total de los 575.000 metros cuadrados totales del sector. Este empresario alicantino tiene a su nombre unos 15.000 metros cuadrados. El resto, con varias empresas en las que participa, según las fuentes consultadas por este diario. Ortiz forma parte de esa AIU, pero alejado de la «toma de decisiones», según las mismas fuentes.
El resto del suelo está en manos de hasta 17 propietarios. Once de ellos dentro de la AIU a la que pertenece Ortiz; de la que Alfredo García es vicepresidente y la exdiputada del PP Ángela Barceló es presidenta. Su familia y otras dos más relacionadas con el sector hotelero de Benidorm aún conservan propiedades en la zona y suman otros 100.000 metros cuadrados de suelo. El resto son pequeños propietarios, algunos dentro de la agrupación y otros fuera de ella, según las mismas fuentes, entre los que también hay bancos e inversores.
El Ayuntamiento de Benidorm adjudicó a Enrique Ortiz el anterior Plan Armanello en 2001. Más de 20 años después, y tras años de idas y venidas, intentos de acuerdos y reuniones, el consistorio le quitaba finalmente la condición de urbanizador al empresario alicantino y el plan volvía al punto de partida. Los propietarios decidieron entonces tomar las riendas y abanderar el desarrollo de este sector que se había ido degradando con los años.
De hecho, en la última década, la zona se llenó de escombros y las casa de la antigua huerta, de «okupas». Desde hace un año, las tareas se han centrado en limpiar las parcelas así como en desalojar a los que allí viven sin ser propietarios. Una tarea complicada y que se alarga en el tiempo.
Cambio de denominación
La AIU cogía las riendas de este plan parcial hace un año y se le cambiaba el nombre por el de Ensanche Levante. El último paso dado ha sido presentar ante el Ayuntamiento la versión preliminar del documento de desarrollo del plan que dará forma a esta zona de expansión de Benidorm. Entre los puntos más destacados figura que podría albergar hasta unos 20 hoteles. De hecho el 35% (205.000 metros) está destinado a suelo lucrativo y el 65% (370.000 metros cuadrados) a dotaciones públicas. Además, habrá zonas verdes públicas de unos 80.000 metros cuadrados.
