De la desconfianza inicial al rechazo frontal. Ésa es la evolución que se ha vivido en el seno de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) en los últimos días. De entrada, despertó ciertas suspicacias el compromiso del Consell de crear un Observatorio del Trabajo Decente, salido del seminario celebrado hace unas semanas por el Botánic II en Montanejos. Veían más apropiado desde la patronal que se denominara Observatorio contra la Economía Sumergida, pero tampoco se cargaron mucho las tintas. Sin embargo, ayer, tras la reunión que mantuvieron los secretarios generales de diferentes organizaciones sectoriales de toda la Comunidad en València, se dejó claro que se va a redoblar la presión contra el Ejecutivo valenciano. El propio dirigente de la CEV, Salvador Navarro, ponía el acento en que de lo que se trata es de abordar con carácter global un problema que afecta a todos, no solo a los trabajadores, y que tiene derivadas laborales, fiscales o legales. El objetivo, en este sentido, es implicar y tener en cuenta a los empresarios y a los autónomos también, señaló Navarro. De hecho, a priori, ésta será una de las cuestiones que la organización tiene previsto plantear en la Mesa del Diálogo Social, que se constituye hoy, y en la que estarán seis representantes de la CEV, entre ellos, el propio Navarro, o Marián Cano, presidenta de la patronal del calzado Avecal; y la secretaria general de Hosbec, Nuria Montes, que, en esta ocasión, acudirá en lugar de Toni Mayor.
En paralelo, también se quiere hacer llegar al Consell el mensaje de que el empresariado apoya cualquier medida contra la crisis climática, así como su compromiso de ser «proactivos», aunque en la jornada de ayer se puso el énfasis en que el Gobierno valenciano «debe tener en cuenta a las empresas y sus condicionantes, y, por tanto, debemos ir todos de la mano para evitar perjuicios innecesarios para el tejido productivo», según subrayó el presidente de la CEV en la Comunidad, Salvador Navarro.
Proceso de selección para el representante en Bruselas
El encuentro de ayer también sirvió para que el presidente de la CEV diera cuenta ante los secretarios generales de la decisión de tener a un representante permanente en Bruselas antes de que acabe el año, lo que implica que el proceso de selección comenzará a la vuelta del parón estival. De momento, ya se han presentado siete candidatos, aunque las previsiones que manejan en la confederación apuntan a que en las próximas semanas habrá más.
