Aunque el proceso de elaboración del turrón permite que sea un producto con una fecha de caducidad bastante prolongada, de entre 15 y 18 meses, en ocasiones la oxidación que afecta a los ácidos grasos de la almendra puede provocar más de una sorpresa cuando se abre una pastilla, que puede desprender olor o saber a rancio. Una situación que, desde luego, no resulta agradable para el consumidor, pero tampoco para el fabricante, que puede ver comprometida su imagen y perder futuras ventas.
Por eso, el instituto tecnológico del sector agroalimentario -Ainia-, el fabricante alicantino Almendra y Miel -responsable de marcas como El Lobo o 1880-, y la firma valenciana Intertronic Internacional decidieron unir fuerzas y han desarrollado un prototipo capaz de determinar en cuestión de minutos si un turrón está en óptimas condiciones para ser consumido o puede presentar algún problema. «De esta forma, las empresas pueden agilizar la gestión del stock y decidir con rapidez qué hacer con un lote que presente problemas», señala el investigador del Departamento de Instrumentación y Automática de Ainia Lorenzo Cervera.
Hasta ahora este tipo de análisis podían demorarse durante horas o incluso días, si había que enviar las muestras a un laboratorio, lo que dificultaba este tipo de controles. La novedad está en la utilización de técnicas ópticas y fotónicas para determinar en apenas dos o tres minutos el grado de oxidación que presenta la almendra, el principal ingrediente de este tradicional dulce alicantino, junto con la miel. Una técnica que también puede aplicarse a la materia prima, de forma que los productores pueden determinar la calidad de las partidas de almendra que tienen en sus almacenes antes de su utilización. Igualmente, también se puede aplicar a otro tipo de frutos secos que sufren este mismo proceso de oxidación, con el que se generan aromas y sabores indeseados o compuestos que pueden llegar a ser potencialmente tóxicos, en los casos más extremos, según Ainia.
La creación de este prototipo, bautizado como Retox, ha sido respaldado por el Ministerio de Economía a través del programa Retos Colaboración 2016, con el que se pretenden fomentar la investigación. En la siguiente fase, será Almendra y Miel la que realice las pruebas de uso efectivo a lo largo de la próxima campaña para continuar perfeccionando su funcionamiento y comprobar su utilidad. El objetivo final, según Cervera, es desarrollar un producto comercial que se pueda vender o pueda ser utilizado por todo tipo de compañías que lo necesiten, que en el sector alimentario suponen un amplio espectro, tanto para el control de materias primas, como para su producto final.
De cara al consumidor, el nuevo sistema aportará garantías sobre la calidad de los turrones y otros productos que pueden encontrar en el mercado.
Campaña para conseguir un emoji en WhatsApp
Ya lo consiguió la paella y ahora es el turrón el que podría tener su propio emoji en Whatsapp. Desde el pasado mes de junio se ha puesto en marcha una campaña para que el Consorcio Unicode acepte incluir a este popular dulce entre los iconos que los usuarios de la popular aplicación pueden utilizar. La diseñadora Sara Verdúa es la autora del dibujo que se presentará y que estará basado en el turrón de Alicante al considerar que puede identificarse más que el de Jijona, según el blog «madeinjijona».
