El Consejo del Colegio de Economistas de la Comunitat Valenciana (COEVA) presentó ayer los resultados de la 24 edición de su encuesta «Los economistas opinan», en la que, si bien retornan a un «cierto optimismo, muy moderado» -al pasar la valoración del 5,26 al 5,32 en la autonomía-, pronostican que en seis meses tanto la economía valenciana como la española «irá un poco peor», aunque mantendrán el aprobado. Así lo apuntaron en la presentación de las conclusiones del estudio, que fue expuesto por el presidente del Colegio de Economistas de Castellón, Jaime Querol; el de Alicante, Francisco Menargues; y el de València, Juan José Enríquez. Los economistas valoran con un 5,36 la situación de la economía de la Comunidad, lo que presenta una leve mejoría desde diciembre de 2018 cuando era de un 5,32. Algo similar sucede con la economía española, que puntúan con un 5,57 frente al 5,46 de hace seis meses.

Francisco Menargues dijo que los resultados reflejan «cierta estabilidad», y añadió que «lo que es significativo es que siempre ha habido una mejor valoración de la economía española que de la valenciana, y es cierto que en los últimos tiempos se había reducido, pero en esta encuesta la diferencia vuelve a aumentar».

Entre los problemas de la economía de la Comunidad, la inadecuada dimensión y estructura de las empresas valencianas se consolida en la primera posición como el principal desafío para el 62,48% de los encuestados. Por detrás, se sitúa el desempleo para el 52% y el déficit de infraestructuras y comunicaciones para un 50%. Además, Menargues destacó que, para los encuestados, el problema de la escasez del abastecimiento en el agua ha aumentado en las tres provincias desde diciembre de 2018, sobre todo en Alicante, al pasar del 21% al 27%.