Los accionistas de Iberdrola ratificarán este viernes una inversión global de 34.000 millones para los próximos cuatro años, en una Junta General que estará marcada por la reelección de Ignacio Sánchez Galán como presidente.

La sostenibilidad medioambiental y las energías renovables, con una inversión de 100.000 millones de euros en los últimos 20 años, según datos de la compañía, han sido los puntales de la gestión Galán y con su reelección se reforzará el objetivo de Iberdrola de convertirse en «referente mundial» en energía limpia.

De hecho, el punto número 5 del orden del día prevé modificar el contenido y el preámbulo de varios artículos de los Estatutos Sociales con el objetivo de reflejar de forma mejorada el compromiso de Iberdrola con los Objetivos de Desarrollo Sostenible aprobados por la ONU y que, entre otros propósitos, incluye garantizar el acceso a energía asequible para todos y modalidades de consumo y producción sostenibles.

Iberdrola dispone ahora de 47.400 megavatios de potencia operativa, el triple que en 2001, y más de la mitad de esta potencia corresponde a fuentes renovables, sobre todo eólica terrestre y marina (16.000 megavatios) e hidroeléctrica (12.000). La energética pretende sentar las bases de un crecimiento sostenible en tres apartados fundamentales: la descarbonización, que va a elevar la demanda de electricidad, los avances tecnológicos y la mayor conectividad del consumidor, que dispondrá de un mayor protagonismo y capacidad de decisión.

España recibirá una inversión total de 8.000 millones de euros en los próximos cuatro años, tal y como anunció la propia compañía el pasado febrero en su actualización de las Perspectivas Estratégicas 2018-2022. Así las cosas, Iberdrola contempla el desarrollo en España de al menos 10.000 nuevos megavatios (MW) solares y eólicos para 2030, una cifra supone triplicar la actual potencia en el país de estas dos tecnologías. De hecho, para el año 2022, prevé haber puesto ya en marcha en España 3.000 nuevos MW renovables. Además, Iberdrola se ha comprometido a reducir su intensidad de emisiones en un 50% para 2030 con respecto a sus niveles de 2007 y a ser neutra en carbono en el año 2050.

Nuevos nombramientos

La reelección de Galán (Salamanca, 1950) como presidente de Iberdrola, cargo que ocupa desde 2006 en sustitución de Íñigo de Oriol, no será la única que se anuncie este viernes en la Junta de Accionistas. También serán reelegidas María Helena Antolín, José W. Fernández, Denise Holt y Manuel Moreu, todos ellos con la calificación de consejeros independientes y se ratificará y reelegirá en el cargo a Xabier Sagredo. Cabe destacar el nombramiento como consejera de Sara de la Rica, Catedrática de Economía de la Universidad del País Vasco, que sustituirá al exministro Ángel Acebes y que se convertirá en la octava mujer con puesto en el consejo de la compañía.

La Junta de Accionistas incluye además la aprobación de las cuentas e informes de gestión del ejercicio correspondiente el año 2018, ejercicio en el que rebasó por primera vez los 3.000 millones de euros de beneficio neto -en concreto ganó 3.014 millones, que suponen más de tres veces el beneficio neto de 2001-, que fue de 906 millones de euros.