El individualismo empresarial ha sido históricamente uno de los grandes males de esta provincia, que se ha visto agravado en los últimos tiempos por la división en el seno de las organizaciones empresariales, algo a lo que ayudó bastante poco la gestión que se hizo. Así fue desde antes de que irrumpiera en esta provincia la nueva CEV reconstituida, incluso desde antes de que Coepa cayera. Por eso, episodios como el de ayer no dejan de ser un paso más, importante, pero sólo un paso, hacia la unidad empresarial. Cierto es que Uepal ha salvado el que de momento se las prometía como el escollo más complicado para lograr una organización empresarial única en la provincia. Había que vencer las resistencias de voces como las de Francisco Gómez o Cristóbal Navarro, que eran las más combativas con el proyecto CEV, y, si no se las venció, al menos ayer se las doblegó, más allá de las motivaciones que cada cual tuviera. El único voto en contra, más testimonial que otra cosa, vino por las autoescuelas.
Sin embargo, no hay que perder de vista cómo empezó todo. Recapitulando. Desde hace algo más de un año, la CEV y los herederos de Coepa que después levantaron Uepal han andado a la gresca. Poco ayudó, por no decir nada, la presidencia de Rosana Perán en la CEV y la de Miguel Baena en Uepal. Sin embargo, a la vuelta del verano pasado, las cosas empezaron a cambiar. Perfecto Palacio sustituyó a Perán y Juan José Sellés a Baena. Más visibilidad en uno y en otro lado, y, sobre todo, cambio de discurso. Comenzaron los primeros acercamientos, que se iban enfriando o calentando en función de los acontecimientos. Para entonces, la fusión ya estaba totalmente descartada. La CEV, como quien no quiere la cosa, contaba en su haber con sectores como el calzado, el metal, el juguete o el mármol, aunque otros, como los agricultores -Asaja- o el transporte -Fetrama- se le resistían, y seguían en Uepal, además, sin doble militancia. La bendición pública del president Puig a la CEV como único interlocutor empresarial, además, en Alicante, y el macroacto de los de Salvador Navarro en enero en el ADDA por su 40+1 aniversario con presencia hasta del Rey dieron la puntilla. Muchos veían la integración de Uepal en la CEV como la única salida si no querían diluirse totalmente. Cuestión aparte es que la CEV lo pusiera fácil.
En esas se estaba cuando la situación explosionó hace ahora dos semanas, a cuenta de la plaza vacante que Perán había dejado en el comité de la Cámara. La CEV propuso cubrir el puesto con Miguel Quintanilla, mano derecha del presidente de la confederación en Alicante, Perfecto Palacio, amparándose en el pacto que permitió a Juan Riera ser presidente de la institución cameral. Sin embargo, pronto comenzaron a salir candidatos alternativos, algo que se atribuyó desde el primer momento al vicepresidente de la Cámara, Antonio Arias, aún fuera del perímetro CEV. Salieron varios nombres, el primero y el que más fuerza tomó, el de Sellés. Se daba por roto cualquier intento de integración. Hasta que llegó el lunes pasado y esa reunión en El Maestral con Sellés, Navarro, Palacio, Arias y Riera. Por vez primera, se planteaba en serio, y con plazos, una integración, en la que ayer comenzó a ponerse la primera piedra. Al final, poco menos que quien parece que creó el problema daba la solución. Tanto que incluso el ingreso de Arias en la CEV también está más cerca de lo que nunca lo ha estado, y, aunque entre el empresariado todo puede cambiar en cualquier momento, hoy por hoy la de Quintanilla se perfila como la única candidatura al comité ejecutivo de la Cámara. «Yo nunca he dicho públicamente que me fuera a presentar al comité», contestaba ayer por la tarde Sellés a la pregunta de si el acuerdo de su junta desactivaba su candidatura a la institución cameral. Suficiente.
¿Armisticio o tratado de paz? Aún está por ver qué pasa en la directiva de la CEV, si da su plácet, qué condiciones se ponen y si Uepal acepta. De momento, y hasta que no se formalice la integración, aún sigue habiendo dos organizaciones que se disputan la representatividad empresarial en la provincia, y Uepal sigue autodenominándose «patronal». El tiempo, pues, será quien determine si hay un armisticio o un tratado de paz, si la unidad empresarial es posible o si Uepal se acaba convirtiendo en un caballo de Troya en la CEV.
Candidaturas hasta el mismo día del pleno y solo con cinco avales
La Cámara de Comercio de Alicante ha convocado el pleno para cubrir la vacante que dejó Rosana Perán para el próximo 25 de marzo por la tarde. En principio, las candidaturas se pueden presentar hasta ese mismo día, y los posibles aspirantes únicamente necesitan cinco avales, según la institución cameral. El voto es secreto. La entidad presidida por Juan Riera convoca así el pleno después de que el viernes la Conselleria de Economía por fin diera traslado de los cambios acordados por la CEV para el pleno de la Cámara.
