Los empresarios y directivos de la Comunidad tienen actualmente una visión positiva tanto de la economía españolacomo de la de su región. Respecto a las proyecciones sobre la facturación, un 67% de los empresarios prevé aumentarla este año, porcentaje que está en línea con la media nacional, situada en el 69%.
La Comunidad Valenciana creció en 2018 un 2,8%, tres décimas por encima de la media nacional del 2,5%. Sin embargo, los empresarios son conscientes del efecto contagio que tendrá la desaceleración prevista a nivel mundial. Así se desprende de la edición de la Comunidad Valenciana del informe Perspectivas España 2019, elaborado por KPMG con la colaboración de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).
Preguntados por su visión actual sobre la economía de la Comunidad Valenciana, un 58% de los empresarios la califica de «buena» y «excelente»; otro 38%, de «regular», y apenas un 4% de «mala». Sus previsiones para 2019 son más cautas: cerca de la mitad (45%) confía en que se mantenga igual, un 43% cree que empeorará y solo un 12% espera que mejore.
Otras conclusiones interesantes de la edición de la Comunidad Valenciana del informe Perspectivas España 2019 son que el 58% ve positiva la coyuntura regional pero un 43% teme que empeore en 2019. Además, un 43% prevé aumentar las contrataciones y un 34% proyecta estabilidad de la plantilla. Uno de cada dos directivos contempla mayores inversiones y un 30% estabilidad. Por otro lado, el 76% de los empresarios proyecta inversiones en analítica avanzada de datos y el 52% en cloud. El 77% apunta los riesgos regulatorios como la principal amenaza de su negocio y el 51% tiene exposición al Reino Unido y teme una contracción de la economía británica.
Para Bernardo Vargas, socio responsable de KPMG en la Comunidad Valenciana, «ante estos nuevos tiempos que vienen, lo importante es ser realista, ajustarse con agilidad y firmeza al nuevo marco y no perder nunca de vista que el único camino posible para seguir creciendo es la innovación».
Perspectivas España
La mayoría de los empresarios españoles espera aumentar su facturación durante este año, incluso a pesar de que una proporción prevé que la situación económica vaya a peor en los próximos meses. El trabajo se basa en una encuesta que recoge las opiniones de 1.030 presidentes, directores generales, consejeros, directivos y mandos intermedios de empresas ubicadas en España y que pertenecen a 25 sectores de actividad diferentes. Sus conclusiones certifican que crece la preocupación por problemas como el «Brexit», la ralentización económica en Europa, la recesión en Italia y las crecientes tensiones comerciales globales. Buena parte de los directivos (el 47%) reconoce que la incertidumbre política española le ha llevado también a frenar decisiones de inversión. De cómo sea el desenlace de esos problemas «dependerá la evolución de la economía internacional, europea y también la española», se refleja en el informe. Las incertidumbres citadas explican que en la encuesta (realizada entre los meses de noviembre y enero) el 48% de los empresarios y directivos aventure que la economía se deteriorará en los próximos doce meses. Es un porcentaje superior en once puntos al que arrojó el sondeo publicado hace un año. El 45% de los encuestados espera que la situación se mantenga igual y solo el 7% (frente al 35% de 2018) predice una mejoría. Hay preocupación y no solo por esos nubarrones internacionales, también por la incertidumbre política doméstica, por el desafío que representa el cambio tecnológico y por la aparición de problemas nuevos asociados a él, como la ciberseguridad.
Ante este complejo escenario, el presidente de KPMG en España, Hilario Albarracín, hizo el siguiente análisis: «Los directivos ven con cautela la evolución económica ante las previsiones de desaceleración y las incertidumbres geopolíticas, pero al mismo tiempo mantienen las inversiones en tecnología para acelerar sus procesos de transformación digital». A esto, el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, añadió que «además de realismo y cautela, los empresarios contamos con el optimismo, la energía y la confianza para dirigir nuestras empresas a través de este entorno complicado en el que estamos».
La transformación digital es señalada en el estudio por el 55% de los empresarios como el principal reto que afrontan sus negocios a corto plazo. La gran mayoría (nueve de cada diez) responde que ya la ha puesto en marcha y cosechando resultados positivos. No obstante, emerge como inquietud creciente el problema de la ciberseguridad.
