Aldi San Isidro Supermercados, la filial de la compañía alemana que se encarga de gestionar la plataforma logística que la cadena tiene en esta población de la Vega Baja y los establecimientos de su área de influencia, logró superar por primera vez los 200 millones de facturación durante el año 2017, aunque sin abandonar las pérdidas contables recurrentes que arrastra. En concreto, de acuerdo con las cuentas anuales que acaba de depositar en el Registro Mercantil, la compañía anotó una cifra de negocio de 206,6 millones, lo que supuso un incremento del 3,8% sobre el ejercicio anterior, y de más de un 32% sobre las cifras de hace cinco años.
Esta mejora permitió reducir en cerca de un 17% las pérdidas, al pasar de los 12,3 millones de 2016 a los 10,2 millones del citado ejercicio. A pesar de los números rojos, la compañía destaca en su informe de gestión que «el resultado final obtenido ha sido el esperado, ya que se ha dado cumplimiento a todos los objetivos presupuestados inicialmente». En este sentido, cabe señalar que las cuatro filiales operativas que Aldi tiene en España -una por cada plataforma logística- presentan pérdidas habituales, que la compañía matriz -Aldi Supermercados SL, la única de las sociedades del grupo en el país que declara ganancias- enjuga anualmente con la concesión de préstamos participativos. Así, al cierre de 2017, Aldi San Isidro acumulaba un saldo deudor con su matriz de 68 millones de euros por esta vía.
En esta misma línea, las cuentas anuales consolidadas de Aldi en España sitúan la cifra de negocios del grupo en 918,3 millones de euros, con un incremento del 13%, y las pérdidas conjuntas, en los 27,9 millones.
A este respecto, fuentes oficiales de la compañía de origen germano apuntaron a este diario que «Aldi se encuentra en fase de crecimiento en España» y que tiene previsto seguir invirtiendo al mismo ritmo que el año pasado, con alrededor de una treintena de aperturas.
Igualmente, destacan que la Comunidad Valenciana es una «región estratégica» para su actividad en España y, en concreto, Alicante es la provincia del país donde tienen su mayor concentración de establecimientos, con un total de 32. Durante el pasado ejercicio, la cadena inauguró tres nuevas tiendas en la Comunidad Valenciana, dos de ellas en la provincia. Según sus cuentas, la sociedad Aldi San Isidro da empleo a una media de 795 personas a lo largo del año.
