El presidente de Cabify Europa, Mariano Silveyra, ha anunciado hoy que la compañía abandonará la Comunidad Valenciana, como ya ha hecho en Barcelona, si la Generalitat saca adelante su propuesta para regular el servicio de alquiler de vehículos con conductor (VTC), que plantea una espera de 15 minutos para su contratación y la prohibición de usar la geolocalización.

Así, el máximo responsable de la única firma que presta este servicio actualmente en Alicante -Uber ha anunciado su llegada pero aún no opera- ha asegurado que esta propuesta "no tiene ningún sentido" y que eliminará de "raíz" los 500 empleos que ya genera el sector en la autonomía y los 2.000 que se iban a crear en los próximos meses gracias a las nuevas licencias.

"El ciudadano necesita más opciones, no menos y aquí lo que se hace es que se vuelve al taxi como única opción, y eso es volver a los años 70", ha señalado Silveyra, tras participar en una mesa de debate dentro del congreso de excelencia directiva Fexdir, que el Círculo de Economía de Alicante ha organizado en el ADDA.

El ejecutivo ha insistido en que imponer un tiempo de espera "hace inviable la prestación del servicio" porque los usuarios no están dispuestos a esa espera "y no te eligen". Así, también ha señalado que la compañía está dispuesta a ir a los tribunales si tiene que marcharse.

Pocas licencias

En cuanto a la situación del servicio en Alicante, ha reconocido que la calidad del mismo en estos momentos no es la que desearía la firma debido a que sólo dispone de unos 30 vehículos, lo que hace que aumente el tiempo que tardar los servicios en llegar hasta el usuario que los ha solicitado, tal y como comprobó este diario en un reportaje este pasado domingo. Al respecto, confía en poder incrementar el número en breve.

En la misma línea, el presidente de Cabify ha anunciado que la firma pretende traer a la ciudad también sus servicios de alquiler de patinetes y motos eléctricos en el momento en que la regulación esté clara, lo que confía que ocurra a lo largo de este primer semestre del año.

En la misma línea, ha insistido en que su intención es convertirse en una plataforma para todas las alternativas de movilidad, incluido el taxi, y que "el enemigo" a batir es el coche particular. Así ha asegurado que en Sudamérica, entre el 30% y el 40% de los trayectos que se contratan con la aplicación son de taxi y ha expresado su deseo de que en España ocurra lo mismo.

Eso sí, tampoco ha ahorrado críticas contra los taxistas que han protagonizado las protestas más violentas en Madrid y Barcelona, a los que ha acusado de secuestrar la ciudad.