El último tramo del año pasado no arrojó un buen balance del empleo en la provincia, a pesar de que coincidió con los meses en que se suele reactivar la contratación por la campaña navideña. Alicante cerró 2018 con una tasa de paro del 15,63%, por encima de la media nacional, que se situó en el 14,45%, y de la autonómica, que bajó hasta el 14,30%, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En conjunto, la provincia acabó el cuarto trimestre con 745.700 personas trabajando. Una cifra que representa 3.300 más que en el mismo periodo de 2017, pero que en la comparativa con el trimestre anterior refleja un descenso en casi 21.000 ocupados, al pasar de los 766.600 alicantinos que tenían un empleo entre julio y septiembre a los 745.700 con que cerró el año.

De forma paralela, el desempleo también presentó una de cal y otra de arena. En el balance anual, el paro registra un importante recorte, con 24.400 parados menos, aunque en la comparativa trimestral suma 1.400 personas sin trabajo. Según los datos de la EPA, en el cuarto trimestre de 2017, en Alicante había 162.500 personas sin un empleo; en el tercer trimestre de 2018 bajaba a los 136.700 y al finalizar el último trimestre del año, la cifra subía ligeramente hasta los 138.100 parados.