Tres de las comarcas más turísticas de la provincia acabaron el año con menos empresas y menos trabajadores que en el tercer trimestre del pasado año por la finalización de la campaña estival. La Marina Alta, la Marina Baixa y l'Alacantí dejaron de tener, en conjunto, 652 empresas inscritas a la Seguridad Social y perdieron 12.000 trabajadores. Un resultado negativo, fruto de la estacionalidad de los negocios turísticos, y que pasó factura al balance del tejido productivo de la provincia en el último trimestre del año, así como al volumen de la mano de obra. Alicante cerró el ejercicio con 59.620 compañías, lo que representa un descenso de 565 con relación a los meses del verano. Pero el desplome del número de cotizantes al sistema aún fue mayor, ya que la provincia perdió en el cuarto trimestre 9.560 trabajadores, según los últimos datos publicados por el Instituto Valenciano de Estadística (IVE).
Esta abultada cifra contrasta, además, con el resultado positivo que arrojó el conjunto de la Comunidad Valenciana, que en el mismo periodo ganó 27.000 asalariados, aunque en el balance de empresas también registró un descenso en más de 460 por los datos negativos que aportaron Castellón y Alicante. La provincia, no obstante, se resarce en la comparativa interanual, al ganar más de 1.000 empresas con relación al último trimestre de 2017 y aumenta en más de 27.000 el volumen de trabajadores inscritos a la Seguridad Social.
Impacto de la estacionalidad
El director de Estudios del Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca), Francisco Llopis, subrayaba ayer la incidencia que tiene la estacionalidad de los negocios relacionados con el turismo en las variaciones trimestrales. Pero, igualmente, advertía de que, «si el análisis se realiza en términos anuales, evitando la estacionalidad trimestral, el resultado presenta unas variaciones positivas en casi todas las comarcas, a excepción del Alto Vinalopó». Un análisis que se puede extrapolar a la evolución trimestral e interanual del empleo, según señalaba Llopis.
Por otra parte, la radiografía del tejido empresarial por comarcas que acaba de publicar el Portal Estadístico de la Generalitat Valenciana coloca a l'Alacantí y a la Vega Baja a la cabeza en cuanto al número de compañías operativas. Ambas concentran más del 43% de las 59.620 empresas con asalariados que operan actualmente en la provincia. La combinación de la actividad de los servicios con la de la industria que se produce en la capital alicantina y en las poblaciones de San Vicente, El Campello, Xixona, Mutxamel o Agost eleva a esta comarca al primer puesto del ránking del tejido empresarial provincial, al sumar más de 14.900 compañías inscritas a la Seguridad Social. Y, en el extremo sur, las más de 10.700 empresas de la Vega Baja colocan a esta zona en la segunda posición de la tabla, al aglutinar el dinamismo productivo de los sectores agrícola, turístico o industrial, teniendo como referencia dos de las principales ciudades de la zona, como son Orihuela y Torrevieja.
Muy de cerca, y con apenas 600 compañías de diferencia, se posiciona el Baix Vinalopó, con más de 9.100 empresas, fundamentalmente, de actividades como el calzado (Elche), la alfombra (Crevillent) o el turismo (Santa Pola), aunque la agricultura y la industria agroalimentaria tienen, asimismo, un importante peso en la economía de esta zona. La relevante concentración empresarial que representan estas tres áreas se refleja, igualmente, en el volumen de la mano de obra, ya que acaparan más del 67% de los 469.585 asalariados cotizantes de la provincia. Además, en este caso, el Baix Vinalopó adelanta en la tabla a la Vega Baja. Sus empresas emplean a más trabajadores: 74.945, frente a los 69.805 de la comarca más meridional.
Turismo, industria y agricultura
Fuera del área donde se ubican sectores industriales con mano de obra intensiva y, tradicionalmente, con empleos menos estacionales, las comarcas turísticas situadas más al norte de la capital son las que se sitúan en la mitad de la tabla. La Marina Baixa aglutina a más de 7.400 compañías y 41.700 trabajadores, mientras que en la Marina Alta operan 6.560 firmas que dan empleo a unas 32.400 personas.
Y el otro polo industrial de la provincia, que conforman las zonas del Alto y Medio Vinalopó, así como l'Alcoià y El Comtat, presenta un balance menos abultado en número de empresas y de trabajadores. En estas comarcas se combinan, igualmente, las actividades del calzado, del mármol y de la industria agroalimentaria con la de la producción agrícola.
