La constructora alicantina Ecisa ha llegado a un acuerdo para refinanciar la deuda de aproximadamente 15 millones de euros que mantiene con las entidades financieras, que incluye, además, la concesión de una nueva línea de avales quinquenal por un importe máximo de 12,5 millones de euros. Así lo anunciaron ayer los máximos responsables de la firma -su presidente, Manuel Peláez, y su hermano y consejero de la compañía, Enrique Peláez-, que señalaron que, de esta forma, la empresa tiene vía libre para acometer su nuevo plan de negocio, con el que pretenden disparar la facturación de la constructora hasta los 180 millones en 2022.

Para conseguirlo, la compañía ha decidido concentrar su actividad únicamente en dos mercados: el español, donde quiere aprovechar la recuperación del sector inmobiliario, y Argelia, donde ya acumula una buena cartera de proyectos, como la reforma del Hotel Hilton o la nueva embajada alemana en Orán. Un repliegue que se produce después del cierre de su delegación en Chile, debido a los desacuerdos con el Gobierno de este país por los sobrecostes en el centro cultural Gabriela Mistral -que han acarreado a la firma numerosas pérdidas, que ahora reclama por vía judicial-, y una vez que la filial que creó en Qatar ha pasado a depender directamente de los nuevos accionistas de la constructora, el fondo Al Alfia.

Descarta Cataluña

La salida de estos dos últimos mercados y la dilatación de las negociaciones con el sindicato bancario -del que forman parte ocho entidades- provocarán que la facturación de este año se quede en unos 85 millones de euros frente a los 126 del año pasado, aunque los propietarios de la constructora se muestran convencidos de que las cifras despegarán rápidamente, una vez que cuenta con las líneas de avales necesarias.

En este sentido, Manuel Peláez recordó que Ecisa ya está trabajando para buena parte de las nuevas promotoras que han surgido tras la crisis -muchas de ellas participadas por fondos de inversión- y que, en estos momentos, tiene más de 800 viviendas en ejecución. La intención de la firma es continuar por este camino para explotar su experiencia, por lo que buscará oportunidades en aquellos mercados más dinámicos.

Así, el empresario señaló que las zonas donde la recuperación del inmobiliario está más avanzada son Madrid, Barcelona, Alicante y la Costa del Sol. En principio, aparcarán un posible desembarco en Cataluña, por lo que sus mayores esfuerzos se centrarán en abrirse camino en la capital del Estado y en Málaga, además de mantenerse como la constructora de referencia en Alicante.