El precio medio de los peajes en las autopistas se encarecerá un 1,67% a partir del 1 de enero de 2019, un porcentaje inferior al 1,91% que registraron de media para este ejercicio, según fuentes del sector. Con todo ello, los peajes de las autopistas crecerán por segundo año consecutivo, aunque en menor medida, tras las caídas registradas en 2016 y 2017.

Además, el Ministerio de Fomento ya ha avanzado que en el caso de las autopistas quebradas que han revertido al Estado, como las radiales de Madrid o la circunvalación de Alicante, le gustaría que mantuvieran los peajes pero con unos precios más asequibles para que aumente así su uso.

El departamento que dirige José Luis Ábalos decidió levantar los peajes en las autopistas cuya concesión vence próximamente, como es el caso de la AP-7, que discurre entre Alicante y Tarragona, y la AP-4, que conecta Sevilla y Cádiz, que finalizan en diciembre de 2019. Además, y como consecuencia de esta medida, la AP-1 que une Burgos y Armiñón, dejó de ser de pago el 1 de diciembre después de 40 años de peaje.

En cuanto al futuro de la financiación de las infraestructuras viarias, Ábalos ha abogado porque se decida por consenso y, aunque no ha desvelado la posición que defenderá en el debate, ha dicho que las carreteras son las únicas infraestructuras de transporte que se pretenden gratuitas.

La actualización anual de las tarifas para aquellas autopistas dependientes de la Administración General del Estado se rige por la Ley 14/2000, de 20 de diciembre, de Medidas fiscales, administrativas y del orden social. El mayor peso en la actualización lo tiene el IPC, que se compara según el promedio de 12 meses (desde noviembre hasta octubre de 2015) con los 12 meses anteriores. Asimismo, estos valores se corrigen ligeramente atendiendo a los tráficos reales y los previstos en el plan económico-financiero de las concesionarias.