Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Alicante gana peso en la CEOE

Antonio Garamendi es proclamado presidente de la patronal española por aclamación y Salvador Navarro tiene todos los números para ser vicepresidente

Parte de los vocales de CEV Comunitat Valenciana, entre ellos, los de Alicante, con Garamendi, tras su proclamación.

No fue necesario esperar a la tercera. A la segunda fue la vencida. Antonio Garamendi se convirtió ayer en el presidente de la patronal CEOE, después de que hace cuatro años ya lo intentara, aunque se acabara imponiendo Juan Rosell. La del empresario vasco finalmente fue la única candidatura, pese a lo que se especuló con la posibilidad de que el ya exdirigente de la catalana Foment del Treball, Joaquín Gay de Montellá, articulara una alternativa. Al final, nada. Garamendi, que da el salto desde Cepyme, se había convertido en el sucesor natural de Rosell desde hacía tiempo, hasta el extremo de que ayer se cumplió el guion, y fue proclamado líder de los patronos españoles por aclamación. Y todo en una asamblea en la que CEV Alicante estaba llamada a participar con siete vocales, y de la que, además, si no hay cambios de última hora, la provincia podría salir reforzada: de dos vocales que tiene actualmente en la junta directiva pasará a tener tres. En estos momentos ya están ahí Nuria Montes, secretaria general de la patronal hotelera Hosbec; y José Antonio Pastor, presidente de la Asociación de Fabricantes de Juguetes. A ellos, en breve, se sumará el presidente de CEV Alicante, Perfecto Palacio.

En paralelo, y si no hay cambios de ultimísima hora, el dirigente de CEV Comunitat Valenciana, Salvador Navarro tiene todos los números para hacerse con una de las vicepresidencias de la patronal española. Tanto es así que lo que parece que se está negociando es que la vicepresidencia que dejaría vacante Navarro en Cepyme pasara a Vicente Lafuente, presidente de la confederación del metal Confeindustria, para mantener la cuota que tiene la Comunidad Valenciana.

Guiños a la Comunidad

De momento, y cargos al margen, parece que Garamendi quiere hacer un guiño claro a CEV Comunitat Valenciana, hasta el punto de que, según fuentes de la patronal, el compromiso del vasco es que su primera visita oficial fuera sea a València, para asistir a un comité ejecutivo y una junta de la organización, el 20 de diciembre, salvo cambio de planes, justo el día después de que en Madrid se nombre al comité ejecutivo y, por extensión, a los vicepresidentes que acompañarán al nuevo dirigente patronal. Junto a Navarro, estarían el presidente de la patronal madrileña CEIM, Juan Pablo Lázaro, y el de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, con el que, por cierto, CEV ya prepara un encuentro similar al que se mantuvo en Murcia. Junto a ellos, estaría el nuevo vicepresidente de Cepyme, cargo que podría ser ocupado por Gerardo Cuervas, de la patronal granadina, una vez autodescartado Navarro, y se especula con la posibilidad de que entre la presidenta de la patronal de las aseguradoras Unespa, Pilar González de Frutos también como vicepresidenta de CEOE. De hecho, Garamendi quiere ampliar el número de vicepresidencias -ahora hay cinco- para que accedan más mujeres, y hasta avanzó que va a utilizar la posibilidad que le dan los estatutos para nombrar a cinco personas en la cúpula directiva y que serán mujeres. Anuncio éste significativo, teniendo en cuenta que hace unas semanas se mostró muy duro con el sistema de cuotas.

El delfín se desmarca

El nuevo jefe de los empresarios, el quinto en la historia de la CEOE, ya empezó ayer a sentar las bases de lo que quiere que sea su mandato. No hay que perder de vista las críticas a Rosell por su dichosa reunión con el líder de ERC, Oriol Junqueras, en Lledoners, y mucho menos los dardos que José Manuel Entrecanales y Simón Pedro Barceló lanzaron poniendo en cuestión el papel de la CEOE en el último Congreso Nacional de la Empresa Familiar, celebrado hace unas semanas en València. «Representamos a los que pisan las alfombras rojas y a los que no, que son la mayoría», defendía ayer Garamendi tras su proclamación.

Es más, por más que se le haya considerado el delfín de Rosell, Garamendi comenzó a marcar distancias en no pocos temas: desde su anuncio de que defenderán España «sin complejos» y sus loas a la Corona, o el tono claramente combativo contra el Gobierno de Pedro Sánchez, al que poco menos que acusó de «orillar» a los empresarios, en referencia en especial a la subida del salario mínimo interprofesional, decisión ésta, destacó, adoptada de forma «unilateral». No menos crítico fue con las propuestas en materia energética y la intención de que se prohíban los coches de diésel y gasolina en 2040. Y todo en un auditorio en el que estuvo la vicepresidenta del Ejecutivo, Carmen Calvo; o el líder del PP, Pablo Casado; o la exvicepresidenta de Rajoy, Soraya Sáez de Santamaría.

Concluida la asamblea, Perfecto Palacio puso el acento en las palabras de Garamendi de que la unión es lo que hará más fuerte al empresariado, pero también en que Alicante ha conseguido un peso histórico en la CEOE. Algo lógico, por otra parte, si se tiene en cuenta la coexistencia de CEV Alicante, que es quien tiene la representación en estos momentos en la CEOE, y Uepal, a la que, desde su creación, se le ha venido identificando como la heredera espiritual de Coepa, la oficial hasta su desaparición, aunque ahora los nuevos dirigentes «uepalistas» traten de apearse del discurso que había seguido la anterior cúpula.

Salvador Navarro, mientras tanto, trató de resumir la nueva etapa que empieza ahora sacando pecho de la posición de CEV: «Somos la tercera organización de la CEOE, aunque por PIB deberíamos ser la cuarta, y eso responde a la apuesta que estamos haciendo por la CEOE, pero también a la que la CEOE está haciendo por la CEV, un modelo que está funcionando muy bien, y lo saben». Solo un detalle: de los más de 3.000 asociados, medio millar son de la Comunidad.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats