El director general de Consumo, Nelson Castro, ha dado las claves para "acertar" en el Black Friday y en el Black FridayCyber Monday: "conocer bien nuestras necesidades, el precio que estamos dispuestos a pagar y tener acceso fácil a una información exacta, clara y suficiente de los productos que nos interesan".

Esas son las recomendaciones que hace el responsable de la Dirección General de Consumo del Ministerio, que encabeza María Luisa Carcedo, de cara al Black Friday, el día 23, y el Cyber Monday, el 26, unas jornadas anunciadas como de grandes descuentos en comercios y en venta "online".

A esta recomendación general se unen una detallada lista de consejos que esa Dirección General ha lanzado a los ciudadanos para ayudarles a conocer mejor sus derechos como consumidores.

El primero de ellos es que antes de comprar hagan una lista de los productos que quieran adquirir, que determinen el precio que pueden pagar por ellos, comparen el producto en distintos establecimientos y hagan un seguimiento previo de esos bienes con suficiente antelación.

Las empresas tienen que facilitar información "exacta y suficiente" para tomar una decisión de compra adecuada porque, según el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, "ocultar información importante o dar información falsa es una práctica comercial desleal".

El precio debe incluir todos los impuestos

El precio de una oferta debe incluir todos los impuestos y los gastos de envío y, si hubiera costes adicionales que no se pueden determinar de antemano, el consumidor debe ser informado adecuadamente.

En los productos rebajados se debe indicar el precio original o el porcentaje de la rebaja, y la garantía de éstos no debe variar con respecto a los no rebajados.

El tiempo de la garantía legal mínima para los productos nuevos es de dos años y para los de segunda mano doce meses y, según la normativa de la UE, los consumidores siempre tienen derecho a ésta garantía sin coste alguno para todas las compras efectuadas en la UE, Islandia, Noruega o Liechtenstein.

Además, el vendedor está obligado a reparar, sustituir, hacer un descuento o reembolsar el importe de la compra siempre que el producto esté defectuoso o no corresponda a lo anunciado, aunque por norma general solo se podrá solicitar un reembolso total o parcial si no fuera posible repararlo o sustituirlo.

Estas son algunas de las reglas de oro, como también lo es el hacer las compras online en comercios electrónicos seguros, es decir en web que empiecen por https://, y realizar pagos seguros, por ejemplo con tarjeta de crédito, y evitar las transferencias bancarias.

En caso de que se arrepienta alguien de las compras a distancia o de las realizadas fuera del establecimiento, siempre que se desarrollen dentro del espacio económico europeo, los consumidores tienen un plazo de 14 de días para rescindir el contrato sin necesidad de justificar el motivo.

En estos casos, el cliente deberá realizar la devolución correspondiente y el comercio estará obligado a devolver las sumas abonadas por el consumidor sin retención de gastos ni penalización. Es lo que se conoce como derecho de desistimiento.

No obstante, existen algunas excepciones previstas en la normativa, como por ejemplo para los billetes de avión, entradas para conciertos o artículos fabricados a medida.