La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) prevé que el déficit público se desvíe una décima este año, hasta el 2,8% del PIB frente al 2,7% comprometido, pero ve "factible" cumplir la meta del 1,8% prevista por el Gobierno, aunque estima que el gasto recogido en el plan presupuestario será 300 millones superior al previsto por el Gobierno.

José Luis Escrivá ha explicado que la desviación en una décima de la previsión de déficit para este año (2,8%) se debe a medidas no recurrentes.

Entre estas se encuentran la recuperación de la empresa Aguas del Llobregat por parte de la Generalitat de Cataluña, que comporta 800 millones más de déficit para este año, así como 300 millones en sentencias referidas a Baleares, Andalucía y Valencia, a lo que se suma el aumento de los intereses y la revisión del PIB por parte del INE.

En conjunto, conlleva una desviación de cuatro décimas en el gasto, que se ve compensado por el aumento en tres décimas de los ingresos por la positiva ejecución de la recaudación de IRPF, Sociedades y cotizaciones y la revisión del PIB.

Para 2019, y también sin medidas adicionales y a política constante, eleva también en una décima su previsión de déficit, hasta el 2,3%, tras un alza de cuatro décimas en el gasto por las sentencias y medidas de CCAA con impacto en el ejercicio y un aumento de tres décimas de ingresos por el efecto base por revisión de 2018.

No obstante, tras analizar el plan presupuestario presentado por el Gobierno, la AIReF ve "factible" cumplir el objetivo de déficit del 1,8% previsto por el Gobierno, con un 45% de probabilidad, que se eleva al 48% si se añaden medidas adicionales acreditadas posteriormente a la presentación del plan, aunque advierte de que se cumpliría "sin muchos márgenes en el proceso de ejecución presupuestaria".

En concreto, la AIReF cree que las partidas de recursos recogidas en el plan presupuestario serán 300 millones más de lo previsto por el Gobierno (2.525 millones), por lo que se situarán en 2.886 millones, principalmente porque el organismo cree que habrá un impacto de 300 millones por la supresión del copago, mientras que el Ejecutivo no calcula efecto económico alguno.

Por el lado de los ingresos, ve "factibles" las previsiones del plan presupuestario del Gobierno de 7.178 millones sumando, eso sí, las medidas no desarrolladas en el plan presupuestario de subida de las bases mínimas de cotización en un 10% o 12% (entre 1.000 y 1.200 millones adicionales), lo que supondría, según sus cálculos, una horquilla de entre 6.078 millones a 7.698 millones.

Sin contar el alza de las bases mínimas de cotización y teniendo en cuenta solo las medidas del plan presupuestario, la AIReF estima una sobreestimacion por parte del Gobierno, ya que el organismo sitúa los ingresos en una banda de entre 5.078 millones a 6.598 millones.

En concreto, cree que la recaudación prevista en Sociedades (1.776 millones) se podrá cumplir, así como fiscalidad verde (670 millones),, pero estima una menor recaudación por el incremento de los tipos de IRPF a las rentas más altas, al augurar entre 245 y 255 millones, frente a los 328 millones del Gobierno.

Cree que si se cumplirán las previsiones gubernamentales referidas a la rebaja a pymes en Sociedades (-260 millones) y del IVA (-53 millones).

En cuanto a impuesto sobre transacciones financieras, cree que la recaudación se situará entre 420 y 850 millones, frente a los 850 millones del Gobierno, y entre 545 y 968 millones la de la Tasa Google, frente a los 1.200 millones del Gobierno.

Por otra parte, prevé unos ingresos de entre 100 y 200 millones por la limitación de pagos en efectivo, frente a los 218 millones del Gobierno; entre 50 y 100 millones por el refuerzo de la lista de morosos, frente a 110 millones; y entre 200 y 2709 millones por las mejores prácticas internacionales, casi la mitad que los 500 previstos por el Ejecutivo.

Para las cotizaciones sociales por la subida del SMI el Gobierno estima 1.500 millones más de ingresos, pero la AIReF eleva el rango hasta situarlo entre 1.500 y 1.700 millones, mientras que por el Impuesto de Patrimonio sucede lo contrario: augura 8 millones e ingresos como mucho, frente a los 339 millones del Ejecutivo.