La Sociedad de Garantía Recíproca de la Comunidad Valenciana (AfinSGR) ha vendido ya en torno al 40% de los activos tóxicos que tenía en su balance tras la operación cerrada el pasado viernes por la que la entidad ha colocado a un fondo buitre 793 créditos, algunos sin garantía, y viviendas y locales comerciales adjudicados por un importe de 28,5 millones de euros, según aseguró ayer a este diario el presidente de la compañía, Manuel Illueca. El también director general del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) explicó que este tipo de operaciones siempre conllevan descuentos sobre el valor de tasación, motivo por el cual la sociedad ha registrado una pérdida con la venta de unos 4 millones de euros. No obstante, al haberse deshecho de un volumen tan considerable de activos tóxicos, su ratio de solvencia ha aumentado hasta el 14,25%.
Illueca calificó de «gran éxito la operación» y añadió que AfinSGR estaba forzada a consumarla porque hay una directiva del Banco de España que fija «el límite del inmovilizado en balance sobre el neto patrimonial en más de tres años. Algunos meses hemos estado por encima y eso nos ha obligado a presentar un plan del Banco de España para vender y rebajar activos».
Por otro lado, la entidad informó ayer de que ha firmado la venta de su antigua sede central en València. Alegando motivos de confidencialidad, AfinSGR se negó a facilitar la identidad del comprador y el importe de la operación, más allá de recordar que el precio de partida era de 2,85 millones de euros. Los 30 trabajadores de la sociedad ya han empezado a prestar sus servicios desde la nueva sede, ubicada en el edificio de los antiguos juzgados, en la plaza Porta de la Mar.
