Los pensionistas alicantinos retomaron ayer sus movilizaciones, tras el periodo vacacional del mes de agosto, en defensa de «las pensiones públicas y ligadas al IPC». La subida del 1,6% para este año y el siguiente -aprobada tras el pacto entre el PNV y el PP para incluirlas en los Presupuestos, y que ha mantenido el nuevo Gobierno socialista- «son medidas insuficientes, porque en 2020 volveremos a la actualización de las prestaciones del 0,25% que trajo la reforma del sistema de 2013 y que nos ha hecho perder poder adquisitivo. Por eso, retomamos las concentraciones de los lunes en la plaza del Ayuntamiento de AlicanteAyuntamiento de Alicant; y ya estamos preparando manifestaciones para el otoño, que se prevé caliente», según advertía Pere Llinares, portavoz de la Plataforma de Pensionistas de l'Alacantí.

En esta nueva etapa reivindicativa, el colectivo confía en sumar fuerzas por parte de los jóvenes, así como de distintas entidades sociales, «porque en qué familia no hay un pensionista o un futuro jubilado. Y tenemos que saber que nos estamos jugando el futuro de las pensiones», argumentaba Llinares. E,igualmente, las trece entidades comarcales que se han ido conformado a lo largo de este año continuarán este mes con los trámites para constituirse en una plataforma provincial que, a su vez, se integrará en la Coordinadora Estatal de Pensionistas.

La de l'Alacantí reunía ayer a un centenar de personas en la plaza del Ayuntamiento, y la del Vinalopó -de Elda-también congregaba a un grupo de jubilados que salía por las calles de la ciudad zapatera para exigir el mantenimiento del sistema de pensiones, con el mismo lema que en Alicante: «Gobierne quien gobierne, las pensiones públicas se defienden», según coreaban los participantes.

De forma paralela a iniciar la constitución de la plataforma provincial, el colectivo alicantino tiene previsto fijar un calendario de reuniones con «el movimiento vecinal y con entidades sociales, culturales y deportivas, así como con colectivos de estudiantes universitarios, porque es un tema que nos interesa a todos», subrayaba Llinares.

De la misma opinión era Jesús Antonio Martínez. Un alicantino de 30 años que es psicólogo y que había conocido la convocatoria de ayer a través de las redes sociales, y con otros jóvenes decidió sumarse a la concentración. «Porque aquí no se lucha sólo por unas pensiones públicas para hoy, sino también por las del futuro. Y nosotros, ya desde nuestra juventud, estamos cotizando para ello», incidía. Este psicólogo espera «que los próximos lunes haya más jóvenes en las movilizaciones, ya que es un tema que afecta a nuestro futuro», según subrayaba.

Paradoja

En este sentido, el propio portavoz de los pensionistas advertía de que, dada la «precariedad laboral y los contratos por horas que imperan en nuestro mercado laboral, se da la paradoja de que hay jubilados que tenemos una prestación superior al salario de nuestros hijos o nietos», señalaba Llinares, quien consideraba que el mantenimiento del sistema de pensiones «es cuestión de recaudación».

Por otra parte, la primera demanda que mantienen intacta es la de volver a ligar la actualización de las pensiones al IPC. «Incluso, con la subida del 1,6% este año, nos quedamos por debajo del encarecimiento de los precios, que en agosto se situaron en el 2,2%», recordaba el portavoz de la plataforma. Por eso, piden la derogación de la reforma del sistema de 2013, que introdujo el índice de revalorización del 0,25%.

Además, reclaman avanzar en las mejoras para las prestaciones de viudedad. «Deben alcanzar el 100% de la pensión que cobraba el cónyuge fallecido y no el 56%, según la última actualización», añadía el representante de los jubilados alicantinos.